Catalina se va de La Promesa. Lo que fue un rumor durante semanas sobre el personaje de Carmen Asecas (29) se convirtió en agria confirmación este lunes 22 con la emisión del capítulo 680 de La Promesa. La única hija con vida de doña Carmen –acuérdense de Tomás– es la última víctima de la pérfida Leocadia (Isabel Serrano). La de Figueroa estaba compinchada con el barón de Valladares. ¡Cómo no! Lo que no consiguieron Cruz y Pelayo, lo ha conseguido Leocadia. En fin, los hombres del barón de Valladares secuestran a Catalina; adónde la llevarán es un misterio que, más tarde o más temprano, los guionistas de La Promesa deberán resolver. El único consuelo es que el final de Catalina no es definitivo. La puerta está abierta.

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De momento, los habitantes de La Promesa no son conocedores del trágico destino de Catalina. La noticia caerá como un jarro de agua fría. ¿Cómo reaccionarán Manuel y Curro? No será el único disgusto para los Luján, pues Leocadia anuncia en el último capítulo de La Promesa el compromiso entre su hija Ángela y Lorenzo. El acabose...

Por qué Catalina se va de La Promesa

No convence a un sector del público la manera en que Catalina sucumbe ante el barón de Valladares, que la obliga a desaparecer de La Promesa sin sus bebés, ni su marido; un Adriano que ya tiene la mosca detrás de la oreja. El motivo tras la desaparición de Catalina podría ser estrictamente argumental –ahí está Josep Cister– o, como en el caso de Ana Garcés (Jana en La Promesa), Carmen Asecas pidió marcharse.

A falta de confirmación por RTVE y Bambú Producciones, la actriz no está grabando las nuevas entregas del serial de época. Ni siquiera está en España, a tenor de lo visto por Instagram. En la distancia, la actriz agradeció a todos aquellos que aplaudían sus últimas escenas en La Promesa. "Bonjour queridos, gracias por vuestros mensajes. Estoy tan feliz y agradecida que os guste mi trabajo. Os amo (y Catalina también)", escribió Carmen Asecas en una historia de Instagram.

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