La moda es un territorio en constante transformación. Cuando las celebridades ponen el foco en un gesto estético, por mínimo que parezca, ese detalle puede convertirse en la próxima gran tendencia global. Desde los labios azules en editoriales de los años 90 hasta las cejas decoloradas, que resurgieron hace poco gracias a artistas como Miley Cyrus. Ahora, la cantante Rosalía ha dado un paso más allá. Se presentó en la Semana de la Moda de París con algo nunca visto, las axilas teñidas de blanco.

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Sí, has leído bien. No depiladas, no naturales, sino teñidas. La cantante catalana apareció con un estilismo en blanco y negro. Remató el look con un detalle que no dejó indiferente a nadie, el vello de sus axilas totalmente decolorado. Es un gesto sencillo, pero con una fuerza simbólica enorme. Esto desafía tanto a los códigos de belleza como a la forma en que entendemos qué zonas del cuerpo pueden o no ser objeto de la moda.

La reacción en redes sociales no se ha hecho esperar

Las redes sociales han explotado, desde los que aplaudían la ocurrencia, hasta quienes la criticaban con ironías del tipo "¿no cuesta menos depilarse?". Rosalía, no se ha quedado callada y ha respondido: "Sí, pero aún cuesta más teñirlos, así que de nada por el servicio".

Lo interesante es cómo este gesto conecta con otros que ya hemos visto en la cultura pop reciente. No hace tanto, Miley Cyrus reapareció en la alfombra roja con las cejas decoloradas, casi invisibles. Esta tendencia ya había sido probada por modelos y actrices como Bella Hadid o Kendall Jenner. La idea era borrar uno de los rasgos más definitorios del rostro. Esto pone la atención en otros elementos, como los ojos o la piel.

Ese detalle, que al principio parecía excéntrico, acabó normalizándose en pasarelas y revistas de moda. De repente, miles de tutoriales en TikTok enseñaban cómo conseguir unas cejas blancas o rubias platino en casa.

Con Rosalía puede pasar algo similar. Lo que hoy parece un gesto extraño podría mañana convertirse en una tendencia o experimento (reto) colectivo en redes, con gente probando en distintas zonas del cuerpo. Primero una celebrity rompe un tabú, luego la industria lo eleva a tendencia y, finalmente, el público lo adapta.

¿Qué más falta que se tiñan las celebridades?

Esa es la gran pregunta. Si ya hemos visto cejas y pestañas en todas las gamas de color, y ahora incluso el vello de las axilas. Entonces, ¿Qué zonas serán las siguientes en pasar por la brocha decolorante o el tinte?. Quizá el de las piernas o los brazos, convertido en un lienzo donde probar tonos pastel o colores neón. O tal vez el vello facial masculino, con barbas teñidas a juego con la ropa. ¿Y qué hay de las pestañas en tonos imposibles, más allá del rímel de colores que ya conocemos?

No hay que olvidar que estas ocurrencias no surgen solo por estética. Son gestos que hablan de libertad corporal, de romper cánones y de cuestionar qué partes del cuerpo deben ocultarse o mostrarse. Lo cierto es que más allá de si nos gustan o no las axilas teñidas , Rosalía ha conseguido lo que toda estrella busca, generar conversación. No solo sobre su look, sino sobre lo que significa jugar con la propia imagen.

Quizá dentro de unos años miremos atrás y pensemos que las axilas teñidas fueron solo el inicio. Al fin y al cabo, si algo nos enseñan los famosos es que el límite de la moda no está en el cuerpo. Está sino en la imaginación.

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