Pedro Sánchez ha salvado este jueves su comparecencia en el Senado, pero por poco. La estrategia del presidente del Gobierno ha pasado por eludir preguntas clave en torno al 'caso Koldo' y no hablar de los aspectos más comprometidos para su liderazgo. ¿Era conocedor de las prácticas de José Luis Ábalos cuándo le destituyó como 'número dos' del PSOE? ¿Se arrepiente de haber confiado en el exministro de Transportes y en Santos Cerdán?

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Estas son algunas de las incógnitas que el líder de los socialistas ha dejado sin despejar. Su forma de esquivar estas y otras tantas preguntas incómodas ha sido tirar de frases manidas que ha repetido hasta un veintenar de veces. "No me consta", "no lo sé", "no recuerdo", "no tengo conocimiento", han sido algunas de ellas.

Durante la mayor parte de la comparecencia, Sánchez ha cuidado las palabras con las que se ha dirigido a la conocida como 'banda del Peugeot'. Incluso ha llegado a bromear con el término acuñado por la prensa al grupo formado por José Luis Ábalos, Koldo García y Santos Cerdán durante las primarias del PSOE.

El jefe del Ejecutivo ha bromeado con el hecho de que los tres investigados del 'caso Koldo' le acompañaran en varios de los mítines de las primarias que le hicieron volver a la Secretaría General. "Me está preguntando usted cuantos iban en el Peugeot, vamos a estar toda la mañana hablando del Peugeot", ha comentado a la senadora de UPN, María Caballero.

Ante la insistencia de la senadora, Sánchez ha eludido responder a varias de las preguntas relacionadas con una etapa clave para la investigación de la UCO, ya que durante esos años es cuando la Guardia Civil ubica el inicio de la trama. Finalmente, entre risas, el presidente ha respondido que en sus viajes al frente del Peugeot le acompañaban distintas personas, "depende del día".

Sobre si alguien le avisó de algunas de las actividades de José Luis Ábalos y su exasesor y si este fue el motivo de su cese como 'número dos' del partido, Sánchez lo ha negado. Es más, ha asegurado que en ese momento el diputado valenciano era una persona de su "máxima confianza", pero que desconocía "sus circunstancias, hábitos y cotidianidad". Palabras medidas, pese a la insistencia de la senadora de UPN.

Tras varias horas, ha llegado el turno del Partido Popular, que ha sido más incisivo en este aspecto. ¿Se avergüenza de Koldo, Ábalos y Cerdán? Ante esta pregunta del senador Alejo Miranda, el líder del PSOE ha tratado con 'guante blanco' a los que en algún momento formaron parte de su círculo cercano en el partido y el Gobierno. "Ha habido comportamientos… Desde el punto de vista personal, yo he mostrado mi decepción", ha respondido.

Entonces, el senador ha ido un paso más allá y le ha preguntado por la prostitución, un momento que podría haber aprovechado para ir contra los investigados por la UCO. No obstante, Sánchez se ha mostrado sereno y ha insistido en que esta era una "actitud impropia" y que el partido ya ha establecido un "código de conducta" de obligado cumplimiento para sus miembros.

Anteriormente, preguntado por su relación con Koldo García, Sánchez ha calificado su relación como "anecdótica". "No recuerdo cuantas veces he hablado con Koldo, pero mi relación con él era completamente anecdótica, así que han debido ser pocas", ha anotado.

Santos Cerdán y el vínculo de la trama con Navarra

Tampoco ha querido aclarar en cuántas ocasiones coincidió con el asesor ministerial y ha titubeado cuando le han preguntado por su papel en las primarias ha dicho no recordar quién eligió al que fuera mano derecha de Ábalos para esta tarea, algo que ha generado cierto revuelo entre los presentes en la Sala Clara Campoamor de la Cámara Alta.

Además del exministro de Transportes y su exasesor, sobre el que no ha dicho prácticamente palabra este jueves ha sido sobre Santos Cerdán. El ingreso en prisión de su secretario de organización es uno de los aspectos que más daño han hecho políticamente al líder socialista.

En la línea de las actividades achacadas al exdiputado navarro, los senadores han preguntado por Leire Díez y si esta hizo algún trabajo en nombre del PSOE o como enviada de Cerdán. Sánchez ha preferido no mojarse y ha contestado con un simple "no me consta".

Contratos de mascarillas y obras públicas

El presidente del Gobierno ha optado por pasar de puntillas por algunos de los temas clave que rodean al denominado 'caso Koldo'. En concreto, no ha respondido ni a una pregunta relacionada con el presunto cobro de comisiones y mordidas que la UCO vincula con los contratos de mascarillas y las adjudicaciones de obras públicas.

El líder socialista se ha escudado en el procedimiento de emergencia que permitió adjudicar contratos a dedo durante la pandemia, y ha evitado contestar a preguntas relacionadas con la empresa de la trama Soluciones de Gestión S.L. La empresa vinculada a Víctor de Aldama se hizo con los principales contratos para la adquisición de material sanitario concedidos por el Gobierno.

Sobre las presuntas mordidas vinculadas por el Instituto Armado al amaño de obras públicas, Sánchez ha eludido despejar dudas sobre algunas de las licitaciones de más peso señaladas por los investigadores.

En concreto, se le ha preguntado por la obra del túnel de Belate adjudicada a la UTE formada por Acciona y la empresa vinculada a Santos Cerdán, Servinabar 2000 SL, sobre la que la Oficina Anticorrupción de Navarra advirtió "ciertas irregularidades", declarándola nula de pleno derecho. El presidente ha afirmado que María Chivite continúa teniendo toda su confianza.

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