Lo que ha sido muy aplaudido en España, y es que pese a la tristeza que le produjo haberse quedado a las puertas de la final, Fridolina Rolfö se alegrase por sus compañera del Barcelona, ha sido muy criticado en Suecia. Por ello, tras su polémica fotografía juntas, Aitana Bonmatí ha salido en defensa de la delantera sueca.

«No, Frido no estaba feliz. Antes de la foto había llorado mucho», quiso aclarar la española, que indicó que fue el fotógrafo el que les pidió que sonriesen.

Precisamente, Fridolina Rolfö indicó tras el partido: «Estoy increíblemente triste. Uno hubiera esperado más, sigo pensando que fue un partido relativamente parejo y creo que hicimos un buen trabajo. Por esa razón, sabe todavía peor. Se decidió por detalles».

No obstante, agradeció el apoyo de Aitana y del resto de sus compañeras en el Barcelona. «Me dan energía y consuelo y me felicitan por el partido de Suecia», reveló.

La defensa de Aitana Bonmatí a Rölfo

Elogiando a Fridolina Rolfö, y tras su polémica fotografía, Aitana dijo en Expressen: «Estoy muy orgullosa de ella, es una buenísima futbolista, una de las mejores del mundo. Es amable conmigo, siempre me ayuda y puedo decir que es una muy buena amiga. No la matéis por esto».

«Es muy profesional, es muy buena persona y la foto la tomamos porque somos amigas. Ella quería llegar a la final igual que yo y somos personas de voluntad fuerte. Pero ella y yo hablamos un poco y nos hicimos la foto. No hay nada más», añadió la española intentando poner punto y final a la polémica.

La victoria de la España ante Suecia

La selección española femenina de fútbol hizo historia este martes al clasificarse para la final del Mundial de Australia y Nueva Zelanda después de imponerse por 2-1 a Suecia en una semifinal muy igualada y que se decidió a su favor en un trepidante tramo final, con un gol en el minuto 89 de Olga Carmona.

España sacó el billete para Sidney del próximo domingo, todo un hito para un equipo que sacó adelante un encuentro muy competido ante un rival muy experimentado y que le había golpeado con dureza cuando ya rozaba con los dedos la final.

Pero, cuando parecía que se vería abocada a otra prórroga, encontró el resquicio para tumbar a un rival que opuso la resistencia prevista y colarse para la pelea por la gloria mundialista ante el ganador del Australia-Inglaterra.

Fueron una decena de minutos de máxima tensión, los que pasaron entre el gol de Salma Paralluelo, de nuevo decisiva, y el decisivo de Olga Carmona, justo después de que Rebecka Blomqvist hubiese repetido la historia de los cuartos de final.

Esta vez no hizo falta media hora extra y el fútbol femenino español derribó una barrera que llevaba intentando tirar desde hace tiempo y apoyado en una generación maravillosa de jugadoras.