La presidencia de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) corre peligro para Luis Rubiales después de haber besado en los labios a Jenni Hermoso durante la entrega de medallas a las campeonas del Mundial femenino. Rubiales era consciente de que necesitaba que la futbolista apareciera junto a él en el vídeo en el que pidió disculpas y no consiguió su colaboración pese a que utilizó a sus dos hijas para presionarla. Al contrario, Jenni Hermoso podría haberle dado la estocada definitiva al solicitar a la Asociación de Futbolistas Profesionales (FUTPRO) que adopte «medidas ejemplares» tras lo sucedido.

«Mi sindicato FUTPRO, en coordinación con mi agencia TMJ se están encargando de defender mis intereses y ser los interlocutores sobre este asunto», señaló la futbolista en un comunicado difundido por FUTPRO en sus redes sociales.

Además, la Asociación de Futbolistas Profesionales expresó su «firme y rotunda condena ante conductas que atenten contra la dignidad de las mujeres». «Desde nuestra asociación pedimos a la RFEF que implemente los protocolos necesarios, vele por los derechos de nuestras jugadoras y adopte medidas ejemplares», añadió.

«Es esencial que nuestra Selección, actual campeona del mundo, esté siempre representada por figuras que proyecten valores de igualdad y respeto en todos los ámbitos. Es necesario continuar avanzando en la lucha por la igualdad, una lucha que nuestras jugadoras han liderado con determinación, llevándonos a la posición en la que nos encontramos hoy», prosiguió FUTPRO.

«Hacemos también un llamado al Consejo Superior de Deportes para que, dentro de sus competencias, apoye y promueva activamente la prevención e intervención ante el acoso o abuso sexual, el machismo y el sexismo», solicitó.

«FUTPRO rechaza cualquier actitud o conducta que vulnere los derechos de las futbolistas y desde el sindicato estamos trabajando para que actos como los que hemos visto nunca queden impunes, sean sancionados y se adopten las medidas pertinentes que protejan a las futbolistas de acciones que creemos son inaceptables», concluyó.

Así habría presionado Rubiales a Jenni Hermoso con sus hijas

Para evitar llegar a esta situación, antes de grabar el vídeo en el que pidió perdón, Luis Rubiales le dijo a Jenni Hermoso: «Mi puesto está en juego, hazlo aunque sea por mis hijas. Necesito que salgas conmigo». Así lo desveló en Espejo Público la periodista de Relevo Natalia Torrente, que asegura que la futbolista rechazó el ofrecimiento.

«Rubiales se dio cuenta de la repercusión mediática que estaba teniendo lo ocurrido y de las palabras del Miquel Iceta. Entonces se acercó a la jugadora con la mayor discreción posible para pedirle que por favor le ayudara en esto», añadió.

Intentando echar un capote a Luis Rubiales, el seleccionador Jorge Vilda trató de hacer que Jenni Hermoso recapacitase hablando con sus familiares, pero tampoco tuvo éxito.