Popular sigue haciendo aguas sobre el parqué. La entidad que preside Emilio Saracho no logra detener la sangría que sufre en las últimas semanas y sigue ahondando en mínimos históricos.

Las acciones del banco han sufrido este jueves un nuevo descalabro, con recortes próximos al 18%, hasta situarse en los 0,5 euros por acción. Este nuevo varapalo rebaja el valor en bolsa de Popular por debajo de los 2.100 millones de euros, una capitalización que es incluso inferior a los 2.500 millones de euros que captó en la ampliación de capital que realizó el banco hace un año.

De este modo, Popular se sitúa como el segundo valor más pequeño del Ibex, sólo por delante de Técnicas Reunidas, con un tamaño más de tres y cuatro veces inferior al de otras entidades medianas del parqué como Bankinter y Sabadell, respectivamente. Un valor que hace diez años se situaba como el octavo más valioso de la bolsa española, hoy ocupa el puesto 50 en el ranking.

El banco que preside Saracho acumula una caída superior al 22% en las últimas seis jornadas, elevando las pérdidas en el año hasta el 43%.

Esta nueva ola de desconfianza hacia el banco se produce tras las informaciones que apuntan a que los supervisores europeos están elevando su vigilancia, ante el temor a que Popular tenga que ser intervenido.

El banco, acosado por su elevada exposición al riesgo inmobiliario, que totaliza unos 37.000 millones de euros, se encuentra en pleno proceso de negociación para una posible venta, mientras ejecuta de forma paralela un proceso de venta de activos para parchear sus necesidades de capital. En este contexto, Popular ha anunciado esta misma mañana la venta de su participación en Targobank por unos 65 millones de euros.