Lo dijo el ministro de Fomento en abril: las autopistas quebradas con peajes serían viables si no arrastrasen la deuda que arrastran debido a la caída del tráfico en los años duros de la crisis. "Son viables si no se considera su mochila, arrojan un beneficio bruto de explotación (Ebitda) positivo y alguna de ellas presenta aumento de tráficos mensuales de casi el 20%".

Según la premisa del ministro Íñigo de la Serna, se producirá un rescate cuyo importe se desconoce, se nacionalizarán los bienes -nueve carreteras de pago- brevemente y entretanto Fomento preparará un concurso para volver a ceder la gestión a empresas privadas. Una lógica muy sencilla que la realidad se encarga de desmentir, a pesar del turismo récord de visitantes extranjeros y del sostenido aumento del turismo nacional gracias a la recuperación económica.

Los números de las autopistas quebradas es verdad que en ocasiones presentan subidas interanuales del 5%, del 10%, del 20% y más allá. Por ejemplo, la AP-41 entre Madrid y Toledo presenta un crecimiento de enero a mayo de 2017 -en comparación con el mismo periodo del año pasado- del 15,27% y la R-5 (Madrid-Navalcarnero) registra un incremento acumulado del 25,09%. La situación aparentemente positiva es en realidad penosa para ambas: la comparativa con el ejercicio anterior está muy lejos de los mejores registros de la etapa pre-crisis. La AP-41 lo tendrá difícil para sobrevivir.

Radiales estancadas

La R-2 (de Madrid a Guadalajara), R-3 (Arganda), R-4 (Ocaña) y R-5 a Navalcarnero, todas en concurso de acreedores, fueron inauguradas por Aznar y Cascos en 2004. "Habrá un antes y un después", dijo el ex presidente. El año dorado para las cuatro radiales madrileñas fue 2007, justo el último antes de la gran crisis. Y el peor, 2014.

La R-2 alcanzó en 2007 una media de tráfico diaria de 11.034 vehículos: en 2014 se desplomó hasta los 4.325. Y en los cinco primeros meses de 2017 el aumento es bastante escaso: 5.306 coches, muy lejos de los datos de hace diez años.

La R-3 entre Madrid y Arganda llegó a tener 16.230 vehículos diarios (2007): siete años después, éstos se precipitaron hasta 9.339 al día. Ahora hay 10.431, una subida proporcionalmente notable con relación a hace tres años pero muy lejos del récord de 2007.

Igual sucede con la R-4 hasta la localidad toledana de Ocaña: el tope de 11.346 vehículos de 2007 se hundió en 2014 (4.516 coches transitando por esa radial, menos de la mitad). De enero a mayo de este año han pasado 5.069 diarios, una cantidad insuficiente.

Finalmente la R-5 entre Madrid y Navalcarnero, dentro de la región madrileña: de 11.864 (récord) se cayó hasta las 6.268 (2014). La R-5 al menos sí ha conseguido un repunte de tráfico más grande que las tres radiales anteriores: en lo que va de curso pasa una media de 8.916 vehículos cada día.

AP-36, Ap-41 y Ciralsa: desastre

La AP-36 entre Ocaña y La Roda es la primera autopista de peaje en ser oficialmente liquidada. Así lo adelantó este diario en diciembre. Y como autopista es un desastre: sus mejores registros los cosechó en 2008, con 4.770 vehículos circulando cada día. ¿Cuál es su peor año? Pásmense: el actual 2017, sus cinco primeros meses, con 2.707 vehículos. Peores números que los tres últimos años. Iba a ser una alternativa para acceder más rápido al litoral mediterráneo y se ha quedado en un agujero de pérdidas.

Ciralsa, la Circunvalación de Alicante, no ha sido liquidada porque un juez ha pospuesto unos meses la decisión. Su récord fueron los 9.990 vehículos que cada día iban por ese peaje en 2008: el peor año fue 2014 con 5.298 por día. Los números de 2017 no andan lejos de los peores tiempos, con 5.445 vehículos.

La AP-41 también está en barrena, con 971 coches al día en la actualidad, solo algo por encima de los 785 del horrible 2014. En 2008 circulaban 2.871 vehículos diarios.

Eje-Aeropuerto y Cartagena-Vera, en auge

El tramo de peaje entre Cartagena (Murcia) y Vera (Almería) se presentaba ruinoso y no lo es tanto: en 2016 logró sus mejores resultados (3.340 coches/día) y en el presente ejercicio anda ahí, codo con codo: de momento pasan a diario 3.158. Los peores números pertenecen a 2012 (2.820 vehículos).

Finalmente, hay una autopista de peaje que obtiene de enero a mayo de 2017 sus mejores cifras de vehículos: se trata del Eje-Aeropuerto de Barajas (la M-12) con 20.996 coches diarios. Pocos apostaban por este tramo de pago que permite ahorrarse unos minutos para ir a Barajas-Adolfo Suárez, pero el boom turístico irrefrenable que vive España -Madrid tiene el aeropuerto más transitado- ha obrado el milagro. El peor año de la M-12 fue 2013: 17.884 viajeros por día.