El problema no es el Cupo vasco. En el Gobierno vasco lo tienen claro, la solución a los problemas de financiación que padecen muchas comunidades autónomas en España no pasa por modificar o suprimir el actual concierto económico vasco. El portavoz del Ejecutivo autonómico, Josu Erkoreka, se ha referido en estos términos al ser preguntado por la petición trasladado por determinadas comunidades para que el actual modelo de financiación vasco, el Concierto Económico y su cálculo, el Cupo, sean revisados.

Erkoreka ha destacado que el peso que la financiación vasca tiene sobre el conjunto es "intrascendente" y que por tanto no debería ser éste "el eje del debate" sobre la financiación autonómica en torno al cual quieren hacer girar el proceso algunas comunidades autónomas.

El portavoz del Gobierno vasco ha lamentado que el Cupo sea un "debate recurrente" que aflore cuando se trata el problema de la financiación autonómica en España. Ha recordado que se trata de un modelo de relación financiera entre el País Vasco y el Estado que es "transparente" además de, "solidario, constitucional y encardinado en Europa": "El Concierto Económico vasco no es el problema de la financiación autonómica, no entendemos cómo se sigue poniendo el foco en ello".

No entendemos cómo se sigue poniendo el foco en el concierto vasco, no es el problema"

Erkoreka también se ha referido hoy, tras la celebración del Consejo de Gobierno, al envío anoche de una primera propuesta por parte del Ejecutivo Sánchez para formalizar la cesión de dos nuevas transferencias. La primera de ellas hace referencia a la cesión de dos líneas ferroviarias de cercanías, cuya titularidad ya reconoció la Justicia al Gobierno vasco, y en segundo lugar la cesión del tramo que discurre por el País Vasco de la autopista A-1 Armiñon-Burgos. Por el momento las negociaciones continúan en la fase de estudio de las propuestas técnicas. Erkoreka ha subrayado que se procurará no alargar mucho en el tiempo la transferencia definitiva de ambas infraestructuras pero siempre que se alcance un acuerdo satisfactorio para ambas partes, "no vamos a recibir las competencias de cualquier modo".

Ayudas de Estado

De igual manera, el portavoz del Ejecutivo ha hecho referencias a la delicada situación por la que atraviesa el astillero de La Naval de Sestao, cuyos propietarios solicitaron ayer al juez que inicie el proceso de liquidación de la sociedad. La intervención del Gobierno vasco para rescatar la compañía, que arrastra unas abultadas deudas que hace años ponen en riesgo su pervivencia, ha sido una constante.

Sin embargo, Erkoreka ha aclarado hoy que el papel que puede jugar la Administración vasca en este caso se debe limitar a la mediación y búsqueda de posibles inversores que en el último momento puedan reconducir la situación. Ha recordado que implicarse con inversiones suficientes para sacar del atolladero a la empresa es imposible, ya que este tipo de actuaciones son consideradas "ayudas de Estado" por parte de Europa y conllevan graves consecuencias.

Erkoreka ha subrayado que el Gobierno continuará dialogando con todos los agentes implicados en el futuro de La Naval. Así, ha señalado que el diálogo con al único armador que actualmente tiene vigente un pedido, el holandés Van Oord, continúa. Ha confiado en que finalmente el armador no lleve adelante su intención de anular la encomienda de construir una draga en el astillero vizcaíno, ya en marcha, y trasladar la finalización del pedido a otro lugar. Tal decisión, de no encontrarse un nuevo inversor, supondría el final para una empresa centenaria y podría en una difícil situación a sus 180 trabajadores.