El de 2020 va a ser un verano atípico en muchos sentidos. También en el mercado laboral. Junio, julio y agosto suelen ser meses muy buenos para el empleo. La campaña de verano en hostelería y turismo, junto a las rebajas del comercio hacen que las contrataciones aumenten durante esta temporada. Sin embargo, los datos que el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones ha recibido como positivos, no lo son tanto.

José Luis Escrivá comentó con optimismo en el Senado que ya se había recuperado un tercio del empleo perdido durante las primeras semanas del confinamiento. No fue el único que consideró que la recuperación ya ha empezado. La vicepresidenta de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, afirmó que "los indicadores por tanto nos muestran ese cambio de tendencia y que la fase de recuperación ya se ha iniciado", en la sesión de control al Gobierno.

Si se observan los datos, en junio de 2019, el número de afiliados ascendió a los 19.517.697. Este año, si se tiene en cuenta el incremento de afiliados de 285.000 personas durante mayo y lo que llevamos de junio, tal como indicó el ministro Escrivá, la afiliación estaría alrededor de los 18,6 millones de afiliados. Es decir, que la desescalada no ha sido suficiente para recuperar los niveles de empleo del año pasado.

De los cerca de 900.000 empleos que se destruyeron entre los meses de marzo y abril, se han recuperado 286.000. A estos, hay que sumar los 2,2 millones de trabajadores que siguen afectados por un expediente de regulación temporal de empleo (ERTE). Entre mayo de 2019 y el de este año, había una diferencia de casi 800.000 desempleados.

La previsión es que los trabajadores que siguen en un ERTE vayan volviendo poco a poco a sus puestos de trabajo. Según reveló el ministro esta semana, más de un millón ya lo han hecho. Sin embargo, las demandas de empresarios y sindicatos de mantenerlos hasta diciembre hacen pensar que la recuperación de esos puestos puede alargarse en el tiempo más de lo deseado. Fuentes del sector empresarial aseguran que hay compañías a las que todavía no sale a cuenta volver a la actividad y por ese motivo mantienen los ERTE de su plantilla.

Más de la mitad de los empleos que se destruyeron en marzo correspondía al sector servicios

Cabe recordar que la Comisión Tripartita entre Gobierno, sindicatos y patronal sigue negociando la prórroga de los expedientes. En la próxima reunión se volverá a debatir sobre las exoneraciones de las cuotas de la Seguridad Social, que son el “punto de fricción” entre las tres partes, según explicaron fuentes sindicales. La propuesta que se discute es que los ERTE por fuerza mayor parciales se prolonguen hasta septiembre.

Turismo y hostelería

El turismo y la hostelería, así como los sectores vinculados a estos dos, han sido los más impactados por la crisis del coronavirus. El turismo supone el 12% del producto interior bruto español y nuestro país fue el segundo más visitado en el mundo, según el Foro Económico Mundial. De hecho, más de la mitad de los empleos que se destruyeron en marzo, cuando se decretó el estado de alarma, correspondía al sector servicios.

Esta dependencia de los visitantes extranjeros supone un lastre para los datos de empleo y más, en pleno verano. Y es que según los datos de las principales consultoras de recursos humanos, turismo, hostelería y comercio multiplican sus contrataciones durante los meses de calor.

El Gobierno acaba de aprobar un plan de más de 4.200 millones de euros para impulsar el turismo. Sin embargo, las empresas del sector echan de menos medidas concretas y también la prórroga de los ERTE, algo que evitaría la llegada de “despidos masivos o quiebras”, afirmaban desde Exceltur esta semana. Desde Cehat piden “flexibilidad” para adaptar el empleo a la demanda que vayan teniendo de clientes.

Para este tipo de empresas, vinculadas a la demanda exterior, resulta “fundamental” ampliar los ERTE hasta final de año. Algo que ya habrían descartado desde el Gobierno.

Previsión de contrataciones

Por otra parte, la previsión de contrataciones para los próximos meses no es muy optimista. La consultora Adecco estimó que en 2019 se firmarían alrededor de 1,4 millones de contratos. Según los datos del Ministerio de Trabajo, entre junio y septiembre se firmaron una media de 1,9 millones de contratos, la gran mayoría de ellos fueron contratos temporales.

La previsión de Adecco para este verano es de 787.400 contratos, un 43% menos que el año pasado. “La temporada estival en nuestro país es sinónimo de un gran repunte del sector turístico y la hostelería, con especial incidencia en las zonas de costa”, apuntan desde la consultora. “Las empresas tienen buenas previsiones, lo que se traduce en una gran demanda de profesionales y un impulso en la contratación”, añaden.

Sin embargo, ManpowerGroup, otra empresa especializada en recursos humanos, es mucho más pesimista. Un informe realizado a través de una encuesta a empresarios concluye que la contratación caerá un 12% en el tercer trimestre del año. Además, sólo un 6% de los encuestados prevé ampliar su plantilla mientras que el 16% prevé reducirla y el 64% mantenerla igual.

Con todo, la tasa de paro alcanzó en España el 14,4% en el primer trimestre del año. Un porcentaje que el Gobierno prevé que alcance el 19% este año y que otros organismos como el Fondo Monetario Internacional o el departamento de análisis de BBVA sitúan por encima del 20%. Pese a haber recuperado un tercio de los empleos perdidos, al mercado laboral español le queda mucho trabajo por hacer. En palabras de la presidenta del Banco Central Europeo, Christine Lagarde: en el empleo, "lo peor está por llegar".