Durante el estado de alarma España se llenó de aeropuertos fantasma. Las restricciones a la movilidad –con las fronteras cerradas y sólo permitiéndose transporte aéreo por razones muy tasadas- vaciaron las terminales de pasajeros y de aviones. Terminales clausuradas, reorganización total de la operativa y las instalaciones, e incluso la mitad de los aeropuertos de España llegaron a permanecer cerrados y sólo abrían si lo pedía una aerolínea para un vuelo concreto.

La nueva normalidad ahora empieza a asomarse a la red de aeropuertos cuando entre finales de junio y principios de julio las compañías han empezado a recuperar la operativa con el levantamiento de las restricciones a la movilidad en España y con la llegada de los primeros pasajeros internacionales procedentes de países europeos y de una cortísima lista de ajenos a la UE. Pero todavía muy lejos de que el verano de la nueva normalidad sea un verano normal.

Los aeropuertos empezaron a recuperar tráfico a finales de junio y han ido registrando crecimientos paulatinos, aún muy lentos. La red de Aena ha pasado de operar una media de entre 200 y 300 vuelos diarios a comienzos de mayo, a 400 a principios de junio y a más de 1.000 a finales del mes pasado, según datos del gestor aeroportuario controlado por el Estado. Ahora a principios de julio el tráfico ya se sitúa en más de 2.000 operaciones diarias, quintuplicando los registros en un mes y duplicándolo en apenas un par semanas.

Sin embargo, esos 2.000 vuelos por jornada con que los aeropuertos han iniciado la anómala temporada alta de verano representan apenas una cuarta parte del tráfico que España registró en julio del año pasado, cuando se superaron los 7.700 vuelos diarios de media durante ese mismo mes.

Durante el mes junio, el último con datos del mes completo, los aeropuertos registraron  43.640 movimientos de aeronaves, un 80,7% menos que en el mismo mes del año anterior; 1,05 millones de pasajeros, un 96,1% menos que el año pasado; y 45.237 toneladas de mercancías, un 41,4% menos. Unos datos que reflejan la paralización del tránsito de personas que se mantuvo hasta el 21 de junio con el estado de alarma para evitar más contagios de Covid-19.

Desde el comienzo de la crisis sanitaria y durante todo el estado de alarma, los aeropuertos de la red de Aena han operado cerca de 1.340 vuelos esenciales. Unos 750 vuelos han sido de repatriación y retorno, que han permitido el regreso a sus hogares de miles de personas, y más de 590 vuelos de carga han facilitado el abastecimiento de material sanitario para hacer frente a la pandemia.