Dicen que la incertidumbre es mala consejera, y más en cuestiones de inversión. El desconocimiento sobre cómo evolucionará la crisis sanitaria y, en consecuencia, la económica, está llevando a los inversores a buscar alternativas de inversión frente a los activos tradicionales en un momento en el que los mercados aún son incapaces de recuperarse del todo.

Entre esas alternativas emergen valores como el oro o el bitcoin, que experimentan fuertes subidas de precio en el año, del 26% y el 60%, respectivamente. Ambos han superado barreras psicológicas relevantes, la de los 2.000 dólares por onza en el caso del oro y la de los 10.000 dólares en el caso del bitcoin. Las diferencias entre ambos activos son notables, pero, ¿comparten la condición de valor refugio?

"Cuanto más tiempo pueda demostrar el bitcoin su atractivo como valor refugio y oro digital, más difícil será para los inversores institucionales explicar por qué no lo están añadiendo a sus carteras", explica Alejandro Zala, responsable de Bitpanda en España.

En su opinión, "es absolutamente increíble ver cuánto ha madurado ya el mercado [del bitcoin] en aproximadamente una década", teniendo en cuenta "lo joven que es".

Para Jorge Soriano, consejero delegado de Criptan, sin embargo, equiparar el bitcoin al oro no tiene sentido, pues "nadie, salvo algunos ideólogos evangelizados, invierte en criptodivisas para proteger su patrimonio, si no para asumir un riesgo con una recompensa potencialmente muy atractiva, lo cual no dice nada malo de bitcoin. Sin embargo, intentar vender la idea de bitcoin como valor refugio o almacén de valor a día de hoy, sí lo hace", apunta.

Se parezca al oro o no, lo cierto es que la pandemia ha supuesto impulso para esta moneda digital ante la incertidumbre general que ha marcado el ritmo del segundo trimestre del año y que se mantendrá durante el segundo semestre.

Así lo demuestran las cifras. La criptomoneda se encuentra en estos momentos en torno a los 11.500 dólares, tras subir casi un 60% en el año y un 20% desde el inicio de la pandemia, en la misma línea que el oro, considerado el valor refugio por excelencia, que sube un 26% en 2020 y un 20% desde que el coronavirus empezó a marcar el día a día de los países occidentales.

Corrección a corto plazo

De acuerdo con  Javier Molina, portavoz de eToro en España, "si la zona de mínimos de los 10.500 dólares no se pierde, lo lógico sería seguir consolidando para, finalmente, intentar el ataque a los 12.000 dólares". De momento, la criptomoneda se acerca poco a poco a este umbral y ya el lunes pasado lograba rozar con los dedos los 11.900 dólares.

Para Zala, de Bitpanda, aunque la previsión es que el bitcoin continúe su periplo al alza a largo plazo, "es probable que se produzca una corrección a corto plazo".

"Las futuras variaciones de los precios dependerán, en gran medida, de cómo avance la lucha contra el Covid-19 y cómo se vea afectada la economía en su conjunto", explica este experto, pues aunque las medidas tomadas por los gobiernos, por el Banco Central Europeo y por la Unión Europea han animado a los mercados, "el impacto a medio plazo de esas medidas aún no está claro".

Por su parte, Soriano, de Criptan, cree que la evolución del precio del bitcoin a corto plazo es "totalmente impredecible". "En dos semanas podríamos tener al bitcoin a 9.500 dólares o a 13.500, y en ningún caso me sorprendería. Sin embargo, en los próximos 6 a 18 meses tiendo a pensar que el bitcoin estará peleando con nuevos máximos históricos, en la bonita etapa de los mercados de price discovery. Y si no fuese así estaría realmente sorprendido", concluye el experto.

Ethereum, nueva promesa

Más allá del bitcoin, hay una criptomoneda que está despuntando. Se trata de Ethereum, que es "sin duda alguna, la gran promesa del mundo cripto ahora mismo", de acuerdo con Soriano.

"Parece indudable que con toda probabilidad es la mejor apuesta del ecosistema", explica el consejero delegado de Criptan, que recomienda no perder de vista a Tezos (XTZ) y Zcash (ZEC). "Y quizá sería interesante observar FTX y su token, así como el proyecto que acaban de lanzar en colaboración con otros actores del ecosistema: Serum", apunta.

Zala, de Bitpanda, coincide en Tezos como futura promesa y añade a la ecuación a Chainlink, pues ambos han experimentado fuertes repuntes en el precio en las últimas semanas.

Los criptoactivos pisan cada día más fuerte, como demuestra el acelerón del bitcoin, y es que, como explica Molina, de eToro, "a estas alturas de la partida, quedarse fuera de este ecosistema es simplemente renunciar a los avances que ya están aquí".