Iberdrola ha presentado este miércoles los resultados pertenecientes al ejercicio de 2020. Al igual que Endesa, la energética ha presentado beneficios. En concreto, la empresa ha sido de 3.611 millones, lo que se traduce en un 4,2% más que el año anterior.

"Hemos puesto nuestro Balance al servicio de la recuperación, con inversiones récord de más de 9.200 millones y adjudicaciones a más de 22.000 empresas por 14.000 millones de euros, las mayores de nuestra historia, para sostener 400.000 empleos en nuestros suministradores", ha dicho Sánchez-Galán en la nota emitida.

En cuanto a las cifras del negocio de la empresa, Iberdrola refleja un Ebitda de 487 millones de euros, marcado por la pandemia del coronavirus.

La compañía mejoró también las principales ratios financieras y reforzó la solidez de su balance: el cash flow o flujo de caja operativo se situó en 8.191,6 millones de euros, tras crecer un 1,6%, y la deuda se redujo un 6,4%, hasta los 35.142 millones de euros.

Mayor dividendo e inversión en renovables

Estos resultados han permitido que Iberdrola vaya a proponer al consejo de administración una retribución al accionista con cargo a 2020 de 0,42 euros/acción, un 5% más que en 2019. A su vez, la dirección de la empresa pedirá un reparto de dividendo complementario, de 0,252 euros/acción, que se sumarán a los 0,168 euros/acción abonados en concepto de dividendo a cuenta.

Para 2021, la compañía prevé la distribución de un dividendo de 0,44 euros/acción.

En cuanto a inversiones en renovables, Iberdrola recalca que aumentará las inversiones hasta los 150.000 millones para 2030 por los 75.000 millones que tenía fijados en su plan a 2025.

Este músculo inversor le permitirá alcanzar una potencia instalada de 95 GW al final de la década -multiplicará la actual por dos hasta los 60 GW en 2025- y una base de activos regulados de 60.000 millones de euros, que serán 47.000 millones en 2025.

La eólica marina se confirmó como uno de los vectores de crecimiento del grupo: cuenta con 1,3 GW instalados y la triplicará con la construcción en la actualidad de 2,6 GW, sin costes de emplazamiento.

España, el peor mercado

Por mercados, el español ha sido el que peor se ha comportado este año debido al efecto coronavirus. Los confinamientos provocaron una demanda eléctrica inferior al año anterior del 5,1%.

Iberdrola en España redujo su Ebitda un 5% y un 13% su beneficio neto en 2020. Pese a esta evolución, las inversiones aumentan un 21%, hasta 2.100 millones de euros, como reflejo de la apuesta por la recuperación verde en el país.