La llegada de miles de inmigrantes a través de la frontera de España y Marruecos en Ceuta ha provocado que todas las miradas se dirijan al país vecino, uno de los principales socios comerciales de nuestro país. La ciudad ha vivido una avalancha que ha sido entendida como una respuesta del reino de Marruecos a la acogida, por parte de España por "razones humanitarias", de Brahim Ghali, líder del Frente Polisario. Ghali reclama la independencia del Sáhara, a lo que Rabat se opone.

La situación política enfrenta ahora a dos países con relaciones históricas, culturales y económicas como son Marruecos y España. “Marruecos es un destino fundamental de la exportación española fuera de la Unión Europea. Es el país que cuenta con mayor número de empresas españolas exportadoras después de Estados Unidos y es el único mercado, junto con Portugal, en el que España es el proveedor líder”, explican desde el ICEX.

La inestabilidad política siempre es un riesgo para la economía y más cuando los dos países son socios comerciales. España es el tercer inversor extranjero en Marruecos. Según los datos de la Office des Changes, recopilados por la Oficina Económica Española en Rabat, en 2018 el stock ascendía a los 4.754 millones de euros. Hasta 2020, nuestro país fue el segundo inversor extranjero, por detrás de Francia, con 125 millones de euros invertidos.

En el lado contrario, Marruecos no tiene tanta relevancia en las inversiones extranjeras que recibe España. Se sitúa en el puesto 58 y acumuló en 2018 inversiones por valor de 108 millones de euros.

La situación es distinta si se observan los datos de la balanza comercial, tal como se mencionaba anteriormente. Las exportaciones de España a Marruecos en 2020 ascendieron el pasado año a 7.381 millones de euros y supusieron el 2,6% del total. Las importaciones sumaron 6.363 millones de euros, según el Informe de Comercio Exterior del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo. En 2019, último año antes de la pandemia, las exportaciones superaron los 8.500 millones y las importaciones, los 6.900 millones.

En el primer trimestre de 2021, las exportaciones a Marruecos aumentaron un 4,1% con respecto al año anterior, hasta los 2.228 millones de euros. Las importaciones aumentaron un 9,1% hasta los 1.898 millones hasta marzo.

El intercambio comercial entre España y Marruecos es diverso, según el Observatorio de Complejidad Económica, nuestro país compra a su principal socio africano alambres y cables eléctricos, ropa, frutas o crustáceos, entre los principales productos. En el lado contrario, España proporciona aceites de petróleo y betunes, alambre de cobre, motores y artículos de plástico, entre otros.

Más de 200.000 empleados marroquíes

La población española en Marruecos, según los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) es de 11.605, mientras que los ciudadanos que nacieron en Marruecos y que residen en nuestro país superan los 960.000. También es considerable el peso de los afiliados marroquíes a la Seguridad Social española. Marruecos es el segundo país por detrás de Rumanía que más cotizantes extranjeros tiene en España, superando los 275.000 afiliados medios en el mes de abril.

Según el directorio de empresas del ICEX, 350 compañías españolas tienen presencia en Marruecos, desde sucursales bancarias a oficinas a compañías energéticas, bufetes de abogados y también empresas que se dedican a la agricultura. Además, hay 781 empresas españolas con más de un 10% del capital de sociedades de derecho marroquí y 674 compañías de derecho marroquí que son filiales de empresas españolas -propietarias de más del 50% de su capital-.

En España también hay empresas marroquíes asentadas. Según la Cámara de Comercio de Marruecos en nuestro país, “los principales sectores de inversión por empresas marroquíes en España en los últimos años se han centrado, según su importancia, en: actividades inmobiliarias; construcción; turismo; hostelería y comercio al por menor”.

13 millones de turistas

En 2019, visitaron Marruecos 13 millones de turistas, muy por debajo de las cifras españolas (84 millones) pero superior a los 2 millones de visitantes que recibió Argelia. Del total, casi la mitad fueron marroquíes residentes en el extranjero, sobre todo de Francia y España, según el informe de la Oficina Económica. Los viajeros españoles que visitaron el país fueron 2,6 millones.

El mismo año, 753.405 marroquíes visitaron España, un 11,57% más que el año anterior. Sin embargo, la pandemia paralizó los flujos turísticos que se habían visto incrementados en los últimos años. De hecho, la suspensión de la operación paso del Estrecho en 2020 supuso la anulación del viaje de más de 5 millones de marroquíes residentes en el extranjero.

Empresarios, en alerta

Las cifras anteriormente mencionadas han provocado que varios empresarios españoles hayan pedido ayuda a Moncloa, según Economía Digital, por miedo a que las represalias de Marruecos se traduzcan en consecuencias económicas.

Con todo, la Comisión Europea ha ofrecido a España los recursos necesarios para asegurar las fronteras de Ceuta y Melilla. "La Unión Europea no va a dejarse chantajear por nadie con la cuestión migratoria", insistió el comisario de Migración y Modo de Vida, Margaritis Shinas. La vicepresidenta primera del Gobierno, Carmen Calvo, descartó en una declaraciones a La Hora De La 1 que los sucesos ocurridos en las fronteras de Ceuta y Melilla durante esta semana hayan sido una crisis migratoria: «Ha sido un asalto a nuestras fronteras (…). Sus fuerzas de seguridad tienen que controlar esa situación y no lo han hecho».