El Grupo El Corte Inglés registró unas pérdidas históricas cercanas a los 3.000 millones de euros durante el primer año de la pandemia. La empresa que preside Marta Álvarez cerró el ejercicio fiscal el pasado mes de febrero con unas pérdidas netas de 445 millones y registró provisiones por valor de 2.500 millones destinadas a cubrir deterioros de inmovilizado, existencias y créditos fiscales.

La cadena de grandes almacenes, que cerró con una cifra de negocios consolidada de 10.432 millones de euros, achaca el resultado al cese de gran parte de su actividad durante el confinamiento y a los posteriores cierres sucedidos en las comunidades autónomas, así como a la ausencia total de turismo, tanto nacional como internacional.

El grupo supera el primer año de la pandemia, eso sí, con un Ebitda positivo de 142 millones de euros y hace gala de la "flexibilidad y capacidad de reacción para renovar sus tiendas, impulsar la digitalización y la omnicanalidad, y desarrollar nuevos negocios".

La empresa dice que la mayor parte de las provisiones "derivan de una actualización de activos como consecuencia de la transformación hacia un modelo de negocio más digital", señala la empresa en un comunicado.

Por áreas, el negocio retail ha descendido tan solo un 19% respecto al año anterior. La empresa dice haber conseguido paliar los efectos de la pandemia mediante "una decidida apuesta por el modelo omnicanal y la digitalización, que permite combinar el entorno online con la tienda física". "El impulso de los servicios de Entrega en el Día, Recogida en Tienda o Clickc&Car, así como la utilización de las propias tiendas como plataformas logísticas para la preparación y envío de pedidos, han resultado decisivos en la evolución del negocio", remarca la compañía.

En este sentido, el proceso de digitalización ha incrementado el peso de la venta online hasta situarse en un 17,3% del volumen total del negocio de retail, lo que representa un incremento del 132% respecto al año anterior.

La falta de movilidad y la ausencia de turistas supuso un fuerte impacto en Viajes El Corte Inglés, cuyas ventas cayeron un 89%

Por otro lado, la falta de movilidad y la ausencia de turistas ha implicado un fuerte impacto en Viajes El Corte Inglés, cuyas ventas han caído un 89%. Esta vía de negocio fue la única que registró un Ebitda negativo de 136,6 millones. La cifra de negocios pasó en esta división de 2.731,65 millones en 2019 a 309,1 millones.

En otras áreas de actividad, el grupo destaca "la fortaleza del modelo de negocio y la gestión de El Corte Inglés Seguros, lo que ha permitido mantener su volumen de ventas en un año tan complicado como 2020".

Asimismo, el Grupo ha reforzado su posición de liquidez que, a cierre del ejercicio, se sitúa en 3.549 millones de euros "permitiendo afrontar todos los compromisos de la empresa con consistencia y firmeza". Por su parte, la deuda ha aumentado en 560 millones de euros, hasta alcanzar los 3.811 millones.

Entre las medidas puestas en marcha por la compañía, está el primer ERE de su historia, que afectó a más de 3.000 trabajadores. De momento, "como avance del primer trimestre del ejercicio 2021, se puede decir que las ventas de retail están cumpliendo con las expectativas, situándose en niveles cercanos a los de 2019, a pesar de los efectos persistentes de la pandemia", concluye la empresa.