CaixaBank y los representantes de los trabajadores siguen negociando el expediente de regulación de empleo (ERE). La última propuesta de la entidad pasa por recolocar a 686 personas en distintas filiales tras su despido del banco. Si no se incluyen estas recolocaciones, los despidos serían 7.605.

La filial que acogerá a la mayoría de las recolocaciones es CaixaBank Tech, la encargada de proveer servicios tecnológicos y de innovación al banco con sede en Barcelona. Esta filial, anteriormente denominada Silk, tenía a cierre de 2020 376 empleados, y ahora, la dirección ha propuesto que se incorporen a ella 464 trabajadores afectados por el ERE tras la fusión con Bankia.

Es decir, el 70% de las recolocaciones tendría como destino esta división y no solo eso, sino que tras estas incorporaciones CaixaBank Tech tendría más del doble de empleados de los que tenía a finales del año pasado.

Fuentes de la entidad explican a El Independiente que esta empresa ya estaba en un proceso de "reorganización". Históricamente, los servicios informáticos y tecnológicos "han estado repartidos entre la entidad y diversas empresas filiales del grupo" y en los próximos años CaixaBank Tech va a cobrar mayor importancia.

Las mismas fuentes apuntan que va a experimentar "un crecimiento próximamente, dado el creciente proceso de digitalización". Es por ello que la "dirección ha propuesto que un número significativo de posiciones que estaban afectadas por el proceso de reestructuración por solapamientos y duplicidades puedan pasar a CaixaBank Tech, en nuevas posiciones con funciones adecuadas a perfiles tecnológicas".

Más recolocaciones

El resto de personas que el banco ha calculado que puede reincorporar en filiales del grupo entrarán a formar parte de la plantilla de la filiales inmobiliaria, de financiación al consumo o de proyectos digitales.

Según datos a los que ha tenido acceso este periódico, CaixaBank ha propuesto que 78 personas se incorporen a Building Center (inmobiliario) que a cierre de 2020 contaba con 116 empleados; 43, a CaixaBank Operational Services (gestión interna) sumándose a una plantilla de 800 personas; 51 lo harían a CaixaBank Payments&Consumer (financiación al consumo), que a finales de año contaba con 549 personas; 21 ficharán por CaixaBank Business Intelligence (proyectos digitales) que ya cuenta con un centenar de trabajadores; 19 personas se sumarían a las 49 que trabajan en Imagin Tech (banca digital); 3 podrían recolocarse en el servicio de prevención, 3 en CaixaBank Facilities Management (mantenimiento y logística) y 4 en la división de microcréditos, Microbank, que a finales de año tenía 29 trabajadores.

Con todo, los sindicatos critican que todavía no se han discutido las condiciones de esas reincorporaciones, que además, se llevarían a cabo tras el despido de CaixaBank. "Es una forma de intentar ocultar despidos", afirman fuentes de la negociación.

Dos días de negociación

Este lunes se han convocado paros parciales entre las 11h y las 12h para reclamar que el ERE sea 100% voluntario y que se prolongue el periodo de negociación, que concluiría este martes, para que sindicatos y dirección puedan acercar posiciones.

Si la dirección no acepta extender la negociación y opta por aplicar "unilateralmente" sus condiciones, los representantes de los trabajadores tienen prevista una huelga para el próximo 9 de junio.