Este lunes, el Gobierno, sindicatos y organizaciones empresariales han llegado a un acuerdo para reformar el sistema de pensiones. El texto aún debe ser ratificado por los órganos de Gobierno de la patronal CEOE, que se reunirán en la tarde de este martes, pero, de aprobarlo, el pacto se firmará esta semana.

Con él, la actual ley de pensiones se modificará para vincularlas de nuevo a la inflación, entre otras medidas que buscan alargar la edad media a la que se retira la población española laboral (sin cambiar la edad legal de jubilación) y garantizar la sostenibilidad del sistema. Son puntos que desde hace semanas ya era conocido que se iban a incluir en el acuerdo, como adelantó este periódico en mayo, a falta de negociar la letra más pequeña.

En esa línea, por ejemplo, el Gobierno ha accedido a incluir en el texto la derogación del factor de sostenibilidad, un aspecto que en principio pretendía dejar para la segunda parte de la reforma, que abordará más adelante. Pero los sindicatos se mostraron sorprendidos al conocer esta intención -también lo recogió El Independiente- y finalmente han conseguido que se incluya ese punto, que termina con el mecanismo que introdujo Mariano Rajoy en 2013 y promete crear en los próximos meses uno nuevo que tenga en cuenta las previsiones demográficas.

El factor de sostenibilidad del PP vinculaba automáticamente las pensiones iniciales al incremento de la esperanza de vida, para que ante la previsión de que los jubilados pasen cada vez más años cobrando su prestación, esta sea menos generosa y se evite vaciar el sistema. Con su aplicación, el sistema nunca dejaba de ser solvente, pero provocó protestas masivas de los jubilados contra «las pensiones de miseria».

Debido a que aún falta el visto bueno de la CEOE, los agentes sociales no han compartido el texto normativo con forma de anteproyecto de ley que han firmado este lunes, pero sí han dado a conocer algunos detalles del pacto más allá de la actualización de las pensiones en función del IPC y del endurecimiento de las jubilaciones anticipadas. Entre ellas, está una novedad que no estaba incluida en los últimos borradores del acuerdo a los que ha tenido acceso este medio: el Ministerio de Seguridad Social ha accedido a que las bajas por enfermedad a partir de los 62 años ahora resulten más "baratas" a las empresas.

Es decir, que la Seguridad Social sufragará el 75% de la cotización en las bajas por enfermedad de los mayores de 62 años, según han explicado a este medio fuentes del dicho departamento. Ahora mismo en España existe un problema con la actividad de los trabajadores mayores, ya que es uno de los países europeos con menor tasa de actividad entre mayores de 60 años, han apuntado. De esta manera, y buscando que las personas que quieran seguir trabajando lo puedan hacer, el Gobierno está buscando eliminar "todas las barreras que existen".

En ese sentido, ante las posibles reticencias de las empresas a la hora de contar con trabajadores mayores, debido a que estas podrían interpretar que pueden causar bajas más habitualmente -lo que a su vez provocaría un aumento de costes para el empleador-, el departamento de Escrivá ha optado por reducir la cotización que tienen que pagar a la Seguridad Social por estos empleados.

Es una medida que busca la permanencia de los trabajadores de mayor edad en el mercado de trabajo. La pretensión del ministro con esta reforma de las pensiones es conseguir que la edad real de jubilación, es decir, la edad media a la que se retiran los españoles, se retrase un poco más, pero sin establecer por ley la obligatoriedad de que la población trabaje unos años más.

Es algo que pretende conseguir mediante incentivos (por ejemplo, premiando a los que decidan trabajar algunos meses o años más de lo estrictamente obligatorio) y mediante desincentivos (como penalizando a quienes decidan adelantar un par de años su edad de salida del mercado de trabajo). En esa misma línea va esta novedad, ya que las empresas tienden a sustituir a los trabajadores de más edad por otros más jóvenes, que son más baratos y además suelen causar baja menos a menudo.

Según La Información, se trata de una medida que ha solicitado la patronal CEOE debido a que tendrá que asumir un mayor coste si permanecen en las empresas estos trabajadores de mayor edad, como consecuencia de las distintas medidas del Gobierno. Esta semana, previsiblemente, se ratificará finalmente el acuerdo entre las diferentes partes y la letra pequeña del mismo será pública, momento en que se conocerán todos los detalles de cada una de las medidas acordadas.