Euskadi quiere declarar festivo el Día de la Mujer. El departamento de Trabajo y Empleo del Ejecutivo vasco, competente en la elaboración del calendario, propondrá que el 8 de marzo del próximo año sea festivo. Lo hará en un próximo Consejo de Gobierno aún por determinar. La titular de la cartera de Empleo, Idoia Mendia, ha asegurado que la propuesta la trasladará primero a los agentes sociales y posteriormente el Gobierno para su aprobación.

El calendario laboral es una competencia institucional compartida por los distintos niveles de Gobierno. Diez días corresponde fijarlos al Gobierno central, dos a los autonómicos y los dos restantes, en el caso del País Vasco, a diputaciones y ayuntamientos como fiestas locales. En Euskadi se han ido variando los días festivos de su competencia a lo largo de los años. Así, el Día de la Mujer que ahora se quiere convertir en no laborable el próximo año tuvo el precedente del 25 de octubre, que durante los Gobiernos de Patxi López fue declarado festivo por ser el día de la aprobación del Estatuto vasco o más recientemente el 5 de septiembre coincidiendo con el 500 aniversario de la vuelta al mundo de Juan Sebastián Elcano.

Mendia ha señalado que con la declaración de jornada festiva el próximo 8-M se pretende poner el foco en la discriminación salarial y laboral que aún persiste entre hombres y mujeres. Ha recordado que esa jornada de reivindicación en favor de la igualdad "atraviesa todas las causas de la igualdad para todos los sectores y personas", lo que la convierte en singular.

Brecha salarial

Durante su intervención, Mendia ha afirmado que se trata de "un paso más en los esfuerzos de sensibilización para acotar todas las formas de desigualdad y, muy especialmente, la brecha salarial". La titular de Empleo en Euskadi ha recordado que la brecha salarial en el País Vasco se ha logrado rebajar en seis puntos en los últimos cuatro años, de modo especial gracias a las subidas del Salario Mínimo Interprofesional, así como la aplicación de medidas que han permitido extender planes de igualada.

También ha incidido en la necesidad de reforzar las inspecciones de trabajo como herramienta para hacer frente a esta desigualada que aún alcanza el 18%: "No hay democracia sin plena igualdad, pero no hay competitividad para quienes no inviertan en salarios, formación, salud laboral e igualdad". Ha instado a los trabajadores y las empresas a recurrir a la inspección de trabajo si consideran que se está incumpliendo la ley, "Es una aliada en la causa de la igualdad", ha señalado Mendia.

La vicelehendakari ha avanzado también que, junto a los programas que incentivan la contratación de mujeres en sectores masculinizados y mejor pagados, quiere diseñar una estrategia de inclusión de hombres en sectores feminizados, para que “en el futuro hablemos de igualdad de oportunidades y condiciones laborales”, cuestión que se abordará en el II Congreso Vasco de Brecha Salarial que se celebrará en junio.