Movimiento empresarial importante en España. Arabía Saudí ha desembarcado en Telefónica, una de las empresas estratégicas con más peso en el país. STC Group, la compañía de telecomunicaciones más importante de Arabía Saudí, se ha convertido en el accionista mayoritario de la española con un 9,9% del accionariado, tras una operación relámpago en 48 horas. STC Group ha conseguido ese porcentaje de Telefónica debido a la caída del 60% en bolsa de Telefónica desde abril de 2016, cuando José María Álvarez-Pallete se convirtió en presidente. 

La compañía saudí anunció el martes su desembarcó en Telefónica. La operación comenzó el lunes con la compra del 2,9% de las acciones, el martes por la mañana comparan el otro 2% hasta el 4,9% que poseen en acciones. Es decir, la compra de acciones se realizó a 3,75 euros El 5% restante lo tienen en derivados, que todavía no se van a convertir en acciones, ya que tienen que tener la autorización del Gobierno de España. Para esta operación hay un plazo de tres meses.

El miércoles a primera hora, los inversores estaban atentos al movimiento de Telefónica en bolsa, ya que la operación se comunicó con los mercados cerrados. Las acciones han comenzado con subidas de hasta el 3%, pero se han ido desinflando hasta “solo” subir un 0,27% hasta los 3,76 euros.

Desde la llegada de Álvarez-Pallete, la operadora no ha tenido un buen desempeño en el parqué. Esto ha hecho que cotice a un precio ‘opable’, es decir, que una empresa compre Telefónica. De hecho, la capitalización bursátil de la compañía española está en 21.627 millones de euros, un precio que se ha reducido considerablemente en los últimos años. De esta manera, STC ha aprovechado esta situación para posicionarse como principal accionista de la compañía. “La baja capitalización de la compañía, síntoma común observado en el sector europeo, implica una infravaloración que la hace susceptible de adquisiciones en un momento complejo para dicho sector de telecomunicaciones”, señala Javier Molina, analista senior de mercados para eToro..

El Gobierno español prorrogó hasta el 31 de diciembre de 2024 las medidas de blindaje para salvaguardar a aquellas empresas estratégicas del país de adquisiciones no amistosas y ventas de activos. El llamado escudo anti-OPAS incluye operaciones de compra de activos en los sectores energético y de infraestructuras, reforzando así la seguridad jurídica y el control de las inversiones extranjeras.

Es por ello y a la espera de la aclaración jurídica correspondiente, que STC Group ha dejado claro que no tiene la intención de tomar el control ni adquirir una participación mayoritaria en Telefónica.

En lo que va de 2023 la teleco ha conseguido avanzar un 9%, pero en el último semestre se ha dejado un 6%. Sin embargo, en el último lustro, Telefónica se ha dejado un 44% de su capitalización bursátil. En 2018, los títulos tenían un valor sobre el parqué de 6,78 euros frente a los 3,76 citados actuales. La subida de la cotización de la operadora siempre fue una de las prioridades de José María Álvarez-Pallete, presidente de la compañía. De hecho, el día que presentó resultados semestrales y anunció un nuevo plan estratégico, se revalorizó hasta un 5% intradía.

Con esta nueva entrada, el accionariado de Telefónica se queda así: BBVA tiene un 4,87%, según los datos de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV); le sigue el fondo BlackRock, que es propietario de 4,48% de la teleco, y le sigue finalmente CaixaBank con un 3,5%. Ninguno de estos tres accionistas ha querido hacer declaraciones sobre el movimiento de la compañía. No obstante, Criteria Caixa (fundación de CaixaBank), que tiene un 2,4% de Telefónica, ha asegurado que este movimiento no cambia su estrategia y que la operadora sigue siendo una “apuesta importante”.

A pesar de este mal desempeño en bolsa, Pallete está consiguiendo el principal objetivo que se puso en abril de 2016 cuando ocupó su cargo como presidente de Telefónica que era reducir la deuda. Durante su mandato, Telefónica ha reducido la deuda desde los 53.116 millones de 2016 hasta los 27.479 millones a cierre del primer semestre.

Además, la expansión en negocio y en activos de la compañía también se suma a la rebaja de la deuda como otro de los hitos importantes que ha conseguido el presidente desde que llegó. Telefónica cuenta con 383 millones de accesos totales, 168 millones de unidades inmobiliarias pasadas con fibra, 292 millones de accesos móviles y tiene presencia en España y a nivel internacional destaca su posicionamiento en Alemania, Reino Unido, Brasil, Argentina, Chile, Colombia, México, entre otros. 

Las fuentes consultadas esgrimen que “Telefónica maneja una cantidad de datos difícil de cuantificar porque es líder de las telecomunicaciones en España”. “Ayuntamientos, comunidades autónomas, millones de clientes e, incluso, el Gobierno tienen contratos con la operadora”, sentencian. Un hecho que no ha dejado pasar por alto Arabia Saudí y que “ha aprovechado para estar posicionada en una de las empresas más sensibles de nuestro país”.