Digital, sostenible, transparente y "sino el más barato", en la puja por ello. Así describe Emili Rousaud, consejero delegado de la flamante CreaEnergia, la apuesta del grupo Factorenergia para competir en el salvaje mercado energético, en expansión y crecimiento a consecuencia de los altos precios de la luz, del gas y de la gasolina.

La estrategia de CreaEnergia cuenta con ejes clave como la inteligencia artificial; una tarifa de luz indexada que se forma a partir del precio de la electricidad en mercado más una cuota fija de gestión mensual de 5,89€; y una voz y un rostro, el de Belén Esteban, imagen de la marca y personaje que da nombre a la tarifa. CreaEnergia sostiene que su oferta ofrece al cliente una opción sin márgenes ocultos y sin permanencia, en la que el consumidor "pagará exactamente cada kWh al precio que lo compra la compañía y podrá optimizar su consumo sacándole partido en los tramos más baratos".

En la presentación de la compañía, Rousaud ha destacado que la nueva tarifa regulada -conocida como PVPC (Precio voluntario para el consumidor)- ya no está directamente indexada a precio de mercado, sino que tiene una parte del precio indexado a futuros. "Hemos hecho un seguimiento de los precios y vemos que tiene una curva descendente y en este momento el mejor producto es este, el indexado a mercado. Para ser muy transparente, en lugar de cobrar un porcentaje sobre el precio o sobre el volumen de energía, ponemos un coste fijo para cubrir la energía renovable que vende CreaEnergia, que tiene garantía de origen", explica Rousaud.

El consejero delegado de CreaEnergia ha insistido en que "la idea es que el producto pueda llegar a ser, sino el más barato, que compita, así como el más transparente". La misión de la nueva energética es "hacer las cosas sencillas y justas para los clientes". En cada factura se detallan todos los conceptos, separando de forma clara la cuota de los conceptos energéticos, evidenciando que el margen de la empresa no depende del consumo del cliente.

Proyecto basado en la inteligencia artificial

La alternativa que presenta CreaEnergia se basa en el uso de la inteligencia artificial generativa para "transformar el sector haciéndolo más eficiente, sostenible y centrado en las personas". Desde la empresa se trabaja para abanderar este cambio, "ya que es un modelo de compañía que promueve de una forma genuina la sostenibilidad".

Según ha explicado Rousaud, la idea de CreaEnergia surge tras la invasión de Ucrania por parte de Rusia y el incremento de precio de las materias energéticas. "Estábamos dando una vuelta para ver qué podíamos hacer para responder a la necesidad de los consumidores de tener mejor precio y condiciones y una tarifa más transparente. Con Open AI nos dimos cuenta de que aparecía una tecnología muy disruptiva que nos daba la oportunidad de iniciar un proceso de digitalización que proporcionara mucha eficiencia a un proyecto empresarial", argumenta el consejero delegado de CreaEnergia.

La energética ha desarrollado un sistema pionero que no solo reconoce y responde a las preguntas de los clientes, sino que lo hace con la voz y el tono característico de la princesa del pueblo, con expresiones reconocidas por todos. Los potenciales clientes que llamen al 676 00 50 50 podrán preguntar por cualquier tema y el avatar responderá en el papel de Belén Esteban. El interesado será atendido por la Belén virtual, que le guiará en el proceso de contratación y a través de una serie de preguntas entender las  necesidades del cliente. De la mano de la inteligencia artificial generativa, puede responder a una amplia  variedad de consultas y adaptarse a sus respuestas en tiempo real.

Tal y como ha apuntado Rousaud en conversación con El Independiente, CreaEnergia nace con un perfil digital, para aportar toda la información de interés para el consumidor a través de su aplicación. "Tenemos un enfoque digital, pero si un cliente lo solicita podemos hacerle llegar sus facturas tanto al correo electrónico como al buzón de su casa. La compañía prefiere el formato digital por su interés de sostenibilidad y para evitar el consumo excesivo de determinados recursos, pero que utilicemos una base de inteligencia artificial no implica que el usuario tenga que tener un perfil digital. Creemos que la gente mayor se va a sentir muy cómoda", asevera Rousaud.

La última de las decenas de sociedades que se crean cada mes en búsqueda de clientes que quieren ahorrarse un buen puñado de euros a final de mes nace sin un techo concreto: "En otros proyectos es fácil hacer proyecciones a futuro; sin embargo, en este caso lanzamos algo que todavía no existe y no sabemos si va a funcionar. Habitualmente cuando uno hace una campaña de marketing tiene muy claras las métricas, pero aquí no estamos llamando al cliente, sino que invitamos al cliente a que nos llame a nosotros", apunta Rousaud, que ensalza la iniciativa: "Hemos desarrollado algo que no nos consta que se haya creado en ningún lugar del mundo".