El Gobierno extenderá hasta junio de 2024 la rebaja del impuesto sobre el valor añadido (IVA) de los alimentos aunque seguirá sin incluir la carne y el pescado pese a la caída del consumo. El anuncio lo hizo este miércoles Pedro Sánchez durante su discurso en la primera sesión del debate de investidura.

Los últimos datos del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA) reflejan una bajada en el consumo de ambos productos. Los datos oficiales muestran una caída del consumo de pescado de un 7,9% entre agosto de 2022 y el mismo mes de 2023. En la carne, la bajada es de un 0,7%, aunque se produce una sustitución de carnes rojas por otras de ave más económicas. La facturación del conjunto de los productos cárnicos ha subido un 12,8% en el período mientras que los de pescado se han incrementado un 2,7%.

El consumo de este último producto es de 18,53 kilos por persona y año en los hogares españoles. En 2013 estaba en 27,2 kilos por persona. "El impacto en las arcas del estado de eliminar el IVA de los productos pesqueros sería de en torno a 886 millones de euros, que podrían destinarse a dejar disponible este dinero para que los españoles pudieran adquirir casi 89 millones más de kilos de productos pesqueros al año, productos que la comunidad científica coinciden en señalar como básicos para llevar una dieta saludable", remarcan desde la patronal Fedepesca.

La medida aprobada para aliviar los bolsillos de los consumidores del efecto de la inflación implica la supresión del IVA del 4% que se aplica a todos los alimentos de primera necesidad (pan, harina, leche, queso, huevos...) y de la rebaja del 10% al 5% del aceite y de la pasta

Desde la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) han celebrado el anuncio hecho por Sánchez, pero lamentan que se siga excluyendo a la carne y al pescado. Una reciente encuesta de la organización a 1.518 personas revela que la elevada inflación en alimentos "afecta sobre todo a estos dos productos básicos".

Según sus cálculos, la compra de pescado ha disminuido en mayor o menor medida para el 60% de los encuestados. Y para la carne los resultados son también mayoritarios: el 54% de las personas ha reducido de alguna manera su consumo. "OCU considera que el IVA del 0% debería aplicarse igualmente a la carne y el pescado para facilitar la adquisición de proteína de origen animal de calidad", expresa en un comunicado.

El detalle del último informe publicado por el departamento que dirige en funciones Luis Planas refleja que en el sector cárnico, solo crece el consumo de pollo (5,8%) en el período de doce meses. La de cerdo cae un 1,1%; la de vacuno, un 7%; la de conejo, un 18,1%; la de ovino y caprino, un 7,7%; y la transformada, un 2,5%. Por su parte, la categoría de pescados cae un 5,9%; la de mariscos, moluscos y crustáceos, un 12,9%; y la de conservas, un 6,5%.

El consumo per cápita de carne anual en el período entre agosto de 2021 y agosto de 2022 era de 40,58 kilos. Un año después, la cifra se reduce a 39,94. El consumo de pesca era de 20,29 kilos y en el mismo período del año siguiente es de 18,52 kg.

Empresas de la gran distribución como Alcampo ya atisban para estas navidades un recorte en el gasto en productos cárnicos. "Estimamos que este año pueda haber un cierto trasvase de lo que es el consumo de carne al pescado por los incrementos que han tenido determinadas familias de carne", explicó este martes el director de Producto de la compañía, Mariano Serrano, durante un encuentro con medios.

En términos generales, el estudio del MAPA refleja que en el período de doce meses se reduce un 3,5 % la compra de alimentación y bebidas para el abastecimiento doméstico a cierre de año móvil agosto 2023. No obstante, el crecimiento en precio medio (11,9 %), provoca un aumento de la facturación del sector agroalimentario (8,0 %).