El presidente del gigante cooperativo del aceite Dcoop, Antonio Luque, ha instado al Gobierno a estar pendiente de la posible venta de Deoleo y "ayudar" para que la compañía se quede en manos españolas. Así lo ha trasladado en un encuentro con medios en Madrid en el que ha anunciado previsiones de batir un nuevo récord de facturación.

Deoleo, fabricante de marcas como Hojiblanca y Carbonell, reconoció a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) que había "iniciado un proceso de sondeo del mercado para conocer sus alternativas estratégicas, incluida una potencial venta". Pese a ello, su presidente Ignacio Silva, aseguraba días más tarde que la compañía no está en venta.

Luque ha dicho que "no hay duda" de que sí lo está y se ha mostrado dispuesto a estudiar una posible compra, aunque no se pronuncia sobre el valor. "¿Estamos dispuestos a estudiarlo? Si hay oportunidad, lo estudiaremos; Deoleo y otras alternativas", ha abundado. En su momento ya lo hicieron. "Lo hemos estudiado, lo vimos y dijimos, vamos a dejarlo ahí y ya está", ha reconocido.

Pero "lo primero que tienen que tomar ellos es una decisión y ver cuál es el momento oportuno [para vender]. Y cuando tomen una decisión, ya veremos", ha proseguido. En este sentido, Luque ha expresado el deseo de que "marcas como las que tiene Deoleo fuesen propiedad de alguien del sector productor que pudiera darle estabilidad, futuro y confianza al sector".

Además, ha subrayado que lo que más le preocupa es "que al que se le venda sea alguien que defienda el tema de la calidad, la pureza y autenticidad del producto". También ha puesto de manifiesto que España necesita "empresas con tamaño y dimensión que puedan mantener una internacionalización adecuada".

También ha advertido de que el año que viene va a ser "muy complicado tanto en el aceite como en la aceituna" por la previsible falta de agua, la baja producción y la falta de stock de enlace entre una campaña y otra. "Hemos aguantado bien el chaparrón, pero 2024 me da pánico", ha admitido.

Sin embargo, también ha subrayado que 2024 "puede ser un año bueno para salir de compras" en el sector agroalimentario. Respecto a esa posibilidad de más operaciones corporativas, cree que "hay cosas que se pueden hacer". No solo dentro, sino también fuera de España, aunque de momento "no hay nada concreto".

El presidente de Dcoop sí ha remarcado que su apuesta por Estados Unidos con la marca Pompeian "está yendo muy bien" y les ha convertido en líderes indiscutibles en aceite de oliva virgen extra. La cooperativa agroalimentaria vende aceite, frutos secos, vino, cereales, leche de cabra. Y casi la mitad de su volumen se vende fuera de España.

Sus previsiones de facturación para este año superan los 1.400 millones de euros, frente a los 1.237 millones de 2022. Aunque no descarta tener que aplicar medidas en alguna de sus fábricas debido al bajo nivel de producción. "Yo no sé si nosotros vamos a poder aguantar sin tener que hacer un ERE o un ERTE porque tenemos la mitad de actividad", ha expuesto.

En cuanto a los precios del aceite, Luque ha pronosticado una situación de vaivén constante en origen durante los próximos meses. No se ha atrevido a poner fecha a una posible bajada de precios en el lineal que pueda notarse en el bolsillo del consumidor y ha añadido que todo dependerá del agua que caiga y de cuánto se retraiga el consumo.

"Si no llueve, el precio no va a bajar. Y si llueve mucho, los precios pueden caer en febrero", se ha limitado a decir. De momento, ha asegurado que en hostelería el volumen ya cae en el último un 40% y en los hogares entre un 30% y un 35%. Pese a ello, ha dicho que el consumidor ha aguantado mejor de lo que pensaban pese a la subida de precios.