La buena marcha del mercado laboral durante 2023 provocó que personas que ni siquiera estaban buscando un puesto de trabajo se incorporaran al mercado laboral. En concreto, 572.400 personas pasaron de la inactividad en el tercer trimestre del año a estar ocupadas. La mayoría se incorporó al sector Servicios, pero también hubo quien encontró un puesto en la Industria, la Agricultura o la Construcción.

Dentro de la población inactiva, el Instituto Nacional de Estadística (INE) incluye a todas las personas de 16 o más años que no figuran como ocupadas, ni como paradas. En esta categoría se incluyen desde estudiantes a jubilados, pero también personas que se ocupan de su hogar, que están incapacitadas para trabajar, pero también aquellas que están disponibles y simplemente, no buscan un puesto de forma activa.

La cifra de inactivos en el cuarto trimestre de 2023 fue de 16,7 millones, ligeramente por encima de la registrada en el trimestre anterior, de 16,4 millones de personas. Sin embargo, el número de personas que estaban en esta situación y que se incorporaron al mercado laboral en los últimos tres meses ha crecido casi en un punto porcentual, con respecto al mismo periodo del año pasado.

De las 572.400 que se incorporaron al mercado laboral, 463.200 lo hicieron en el sector Servicios, un 77%. El 9,8% (48.300) lo hizo en el sector de la Agricultura, el 8,73% (41.900) encontró un puesto en la Industria y el 4,41% (19.000) se incorporó en la Construcción.

Estas incorporaciones están en la línea con la creación de empleo del cuarto trimestre. Entre el último trimestre de 2022 y el de 2023, los Servicios crearon 629.200 puestos de trabajo.

Con todo, la cifra de población activa, aquellos ciudadanos mayores de 16 años que trabajan o están en búsqueda de empleo, sigue aumentando. En 12 meses, esta cifra alcanzó las 589.600 personas. Esto llevó a que el desempleo se redujese en 193.400 personas, una cifra muy por debajo del número de puestos creados.

El aumento de la población activa se produce por varios motivos. La inscripción en los servicios de empleo es obligatorio para acceder a subsidios como el ingreso mínimo vital. Por otra parte, se produce cuando los ciudadanos confían en la buena marcha de la economía y pasan de la inactividad a la búsqueda de empleo.

Según los datos de la EPA, en 2023 se crearon 783.000 empleos y la tasa de paro bajó al 11,7%, una décima por debajo de la registrada en el tercer trimestre del mismo año. Así, a finales del pasado año la cifra de ocupados superó los 21,2 millones.

La cifra de parados fue de 2,8 millones y terminó el año por debajo de los 3 millones de desempleados, por primera vez en 16 años, según los datos del Ministerio de Trabajo.

El empleo indefinido siguió creciendo en 2023 y aumentó en 804.200 personas, mientras que el temporal disminuyó en 140.300. En el cuarto trimestre esta tendencia continuó, con un alza de 68.300 asalariados indefinidos, frente al descenso de 152.500 temporales. De esta forma, la tasa de temporalidad siguió reduciéndose hasta el 16,49%.

El sector privado concentró la mayor parte del empleo creado a lo largo del
último año, con la creación de 715.900 puestos de trabajo, hasta superar los
17,6 millones de empleos privados, frente a los 67.100 del sector público, que
se sitúa en casi 3,6 millones de puestos de trabajo.

En 2023 se redujeron en 115.100 los hogares con todos los miembros en paro hasta los 932.400 y aumentaron en 399.400 los hogares con todos los miembros ocupados, hasta los 11.654.700.