En Estados Unidos se ha materializado el peor escenario para los mercados: la volatilidad. Las Bolsas europeas han amanecido con pérdidas contagiadas por las dudas sobre los resultados de las elecciones presidenciales, que, horas después del cierre de los colegios, siguen sin arrojar una victoria clara de ninguno de los dos candidatos. Sin embargo, el Ibex 35 ha cambiado de rumbo según se han ido conociendo nuevos datos y la victoria de Joe Biden, el candidato democráta, va cogiendo peso hasta cerrar la sesión en positivo.

En los días previos a las elecciones, todos los expertos coincidían en que el peor escenario para los mercados era una victoria poco clara que obligue a alargar durante días la llegada del resultado final, así como que el actual presidente, Donald Trump, no reconociera el resultado de los comicios, lo que daría lugar a mucha volatilidad. Este mal augurio se materializaba ya en los primeros compases de la sesión bursátil.

El Ibex 35 ha registrado las peores cifras en Europa desde los primeros minutos de la negociación. Aunque abrió la sesión con una caída del 2,6%, consiguió moderarla a media mañana hasta el 0,4% y ha cerrado con una subida del 0,5% contagiado por el optimismo de la Bolsa estadounidense, que amanecía con ganancias.

El Ibex 35, en todo caso, se ha quedado rezagado respecto al resto de Europa, donde las Bolsas empezaron el día con caídas superiores al 1%, incluso del 2% en el caso de Frankfurt, pero lograban darse la vuelta tan solo una hora después. El parqué de París ha terminado el día con un ascenso del 2,4%, el de Frankfurt con uno del 2% y el de Londres con uno del 1,7%.

Al otro lado del charco, los índices estadounidenses se movían en terreno positivo. El S&P500 sumaba un 2,9% y el Dow Jones un 2,5%, mientras que el Nasdaq se disparaba un 4,5%.

En el mercado de deuda, por su parte, la rentabilidad del bono estadounidense a diez años caía casi un 11%.