Rodrigo Echenique, quien fuera mano derecha de Emilio Botín en Santander, abandonará el banco en los próximos días tras más de treinta años en la entidad. El consejo de administración del banco ha acordado la entrada de una nueva consejera al máximo órgano de gestión del banco, a cuya pertenencia el directivo ha renunciado.

El banquero ha sido uno de los pesos pesados del banco durante las últimas tres décadas y hasta mayo de 2019 ocupaba los cargos de vicepresidente del banco y de presidente de Santander España. Quiso dejarlos con anterioridad y que su sustituto fuera José Antonio Álvarez, actual consejero delegado, pero el fichaje frustrado de Andrea Orcel dio al traste con estos planes.

"En nombre del consejo, me gustaría reiterar el privilegio y el honor que ha supuesto para el banco contar con Rodrigo. Su trabajo ha sido clave en el crecimiento y el éxito de Banco Santander durante los últimos 30 años, desde el lanzamiento de la Supercuenta en 1989 hasta la reciente compra de Banco Popular. Le echaremos mucho de menos", ha afirmado Ana Botín al respecto de la marcha de Echenique.

El directivo también ha sido clave durante el mandato de la banquera y, especialmente, durante la integración de Popular tras su compra, en junio de 2017, entidad de la que fue presidente transitoriamente.

Este martes, el consejo de administración de la entidad ha aprobado que su sustituta en el órgano de gestión sea la mexicana Gina Díez Barroso, presidenta de Grupo Diarq, compañía dedicada a la arquitectura y el diseño de proyectos inmobiliarios en México y Estados Unidos, así como de Universidad Centro. Díez había sido hasta ahora consejera independiente en Santander México.