El Gobierno aprobó el Real Decreto-ley 11/2020, de 31 de marzo, de medidas urgentes complementarias en el ámbito social y económico para hacer frente al Covid-19, en el que se incluía, entre otras, la posibilidad de disminuir la potencia contratada con la empresa de electricidad.

En base a esta normativa, Ciudadanos ha propuesto la eliminación de la doble imposición existente en la actualidad, por ejemplo, en las facturas de la luz. En ellas se hace frente al Impuesto sobre la Electricidad que, a su vez, forma parte de otro impuesto: el del IVA.

Pero la electricidad no es el único suministro en el que ocurre esta doble imposición. También se dan situaciones similares con el IVA que se aplica en las facturas del gas o en el Impuesto sobre Hidrocarburos. Un gasto que, dada la crisis económica surgida por el coronavirus y para muchos autónomos, supone un desembolso innecesario.

IVA reducido

Asimismo, Ciudadanos propone implantar un tipo de IVA reducido en lo que se refiere a los suministros de luz y gas. De esta forma se produciría una bajada en la facturación de estos que, no solo ayudaría frente a esta crisis sino que lo haría en momentos difíciles futuros y supondría un menor gasto habitual para lo autónomos.

Según explican en el texto presentado, se trataría también de minimizar el riesgo y las posibilidades de que se generen impagos o retrasos que deriven en cortes de estos suministros. Una situación que agravaría los intentos de iniciar la actividad tras el parón generado por la crisis del coronavirus.

Para hacerlas llegar al Gobierno, el partido naranja planteó estas ideas a través de una Proposición no de Ley el pasado 17 de abril, de la mano de la diputada María Muñoz Vidal y de José María Espejo-Saavedra Conesa, portavoz del Grupo Parlamentario Ciudadanos.