Los autónomos que quieran adquirir vehículos eléctricos también podrán acceder al Plan MOVES III. Se trata de un programa de ayudas directas con diferentes cuantías en función del tipo de vehículo. También se recoge la opción de las infraestructuras de carga rápida.

Se incluyen coches, motos o furgonetas

Si la adquisición es de un vehículo, el autónomo podrá obtener hasta 4.500 si no se achatarra el vehículo antiguo. En caso contrario la ayuda podrá alcanzar los 7.000 euros. Si hablamos de motocicletas, la ayuda será de hasta 1.300 euros.

Para aquellos trabajadores que necesiten una furgoneta, la ayuda se incrementará hasta los 7.000 euros sin achatarramiento. Con él, se incrementará hasta 2.000 euros más, con un importe máximo de 9.000 euros.

Asimismo, en determinados supuestos será posible ampliar estas cuantías hasta un 10% más. Es el caso de taxis, VTC, personas con movilidad reducida y los municipios de menos de 5.000 habitantes.

Las ayudas no solo incluyen la compra de vehículos. También se podrán solicitar para la instalación de infraestructuras de recarga rápida y ultrarrápida de este tipo de vehículos.

El objetivo es tener 250.000 vehículos eléctricos en 2023

Este nuevo plan de ayudas está dirigido a fomentar la adquisición de vehículos eléctricos, frente a las otras opciones disponibles en el mercado. No en vano, desde el Gobierno esperan contar, al finalizar los dos próximos ejercicios, con 100.000 puntos de recarga y 250.000 vehículos eléctricos.

De hecho, este programa cuenta con un presupuesto inicial de 400 millones de euros para ayudar a tal fin. Además se espera poder ampliar hasta 800 millones de estos este capital, hasta que esta línea finalice en 2023. A toda esta inversión habrá que sumar otros 300 millones de euros que se utilizarán en líneas similares. Todas ellas con el objetivo de favorecer la sostenibilidad y cuidado del medio ambiente con el transporte.