Hasta ahora ha sido una suerte de 'isla' rodeada de quienes peores indicadores presentaban en todo el país y con los que comparte vecindad. Lejos de ser datos positivos comparados con los criterios de algunos países europeos, la incidencia de la pandemia en el País Vasco si arrojaba una fotografía notablemente más positiva que otras Comunidades Autónomas en España. Una imagen sin embargo que en los últimos días, en particular ayer, comenzó a desenfocarse. Euskadi registró este martes un importante repunte de casos en lo que puede ser un indicador de que el muro de contención en la transmisión que ya padecen sus vecinos, Navarra, La Rioja o Castilla y León empieza a resquebrajarse.
En los últimos días el País Vasco acumula un repunte paulatino que le ha llevado a aguantar la respiración. Los últimos datos de ayer incrementan hasta los 529 casos la incidencia, con una tasa de contagio que alcanza ya el 7,8% y 274 casos por cada 100.000 habitantes en las últimas dos semanas. Hacía más de un mes que no se alcanzaba una tasa de contagios tan elevada.
Aunque la herida por ahora no se ha producido el Gobierno vasco sí que prepara la venda. El lehendakari Urkullu encargó hace unos días un informe a los servicios jurídicos para analizar el proceder en caso de que, como ha ocurrido en Madrid, finalmente también Euskadi se viera inmersa en una situación similar. Por ahora la posibilidad de que el Gobierno central pueda decretar el Estado de Alarma en Euskadi “no está encima de la mesa”, aseguran desde el Ejecutivo Urkullu. Sin embargo, vistos los precedentes en otras Comunidades Autónomas ya se cuenta con un informe jurídico ante ese “hipotético” escenario. En el citado documento se concluye que cualquier decisión en ese sentido deberá contar con el aval del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco para ser aceptado y que corresponderá a la Consejería de Salud gestionar ese escenario en caso de que se produjera. Concluye además que cabe delegar en el lehendakari la autoridad sanitaria y la toma de decisiones.
El informe solicitado por el lehendakari apunta que además de un aval científico y sanitario las medidas que en su caso se adoptasen requeriría del respaldo judicial, en particular de la Sala de lo Contencioso-administrativo. El portavoz del Gobierno vasco subrayó ayer que el estudio encargado también ha dado por bueno el procedimiento de toma de decisiones implantado en Euskadi durante la pandemia y que pasa por la declaración del estado de emergencia sanitaria, la activación del LABI -el órgano consultor y de coordinación del Gobierno-, y la permanente comunicación con el Ejecutivo central.
Por ahora la evolución de la pandemia en Euskadi, pese a crecer a un ritmo acelerado en los últimos días, parece estar lejos de la imposición de un Estado de Alarma. Pero Euskadi está rodeada de los peores indicadores, según los últimos datos del Ministerio de Sanidad. De las cinco comunidades autónomas que registran una mayor incidencia del Covid en España, tres son fronterizas con el País Vasco: Navarra, La Rioja y Castilla y León. Sólo uno de los vecinos de Euskadi, Cantabria, registra mejores resultados.
Un ratio de contagio al alza
Sin duda, la relación con Navarra y La Rioja fluida en Euskadi y es la que más inquieta, no en vano la Comunidad foral es la que registra la mayor incidencia del país, con 756 casos por cada 100.000 habitantes. En la vecina Castilla y León también la situación es preocupante. Actualmente la incidencia ronda los 403 casos, una cifra superior a los 384 casos de La Rioja.
Ambas comunidades vecinas superan el 10% de positividad que el Ministerio de Sanidad ha fijado como uno de los tres requisitos para declarar el Estado de Alarma. La realidad riojana es de un porcentaje de casos positivos del 12,5%, del 15,2% en Castilla y León y del 13% por cada cien PCR realizados en Navarra. En el caso de la comunidad castellanoleonesa además se acerca al nivel de saturación de las UCIs, donde la carga asistencia generada por el incremento del Covid ronda ya el 32%, muy cerca del 35% que como máximo ha establecido Sanidad.
Hasta hace sólo tres días la incidencia del virus en Euskadi la situaba como una de las mejor posicionadas del país, convirtiéndola en una suerte de ‘isla’ rodeada de los datos preocupantes de quienes encabezaban ese ranking de infección. El País Vasco ocupaba los puestos más bajos de la lista de impacto, sólo superior a Galicia, la Comunidad Valenciana, Cantabria y Canarias. Esa situación en sólo 48 horas se ha agravado al pasar la incidencia de 189 a 274 casos por cada 100.000 habitantes.
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