El informe de Tribunal Supremo sobre la concesión de los indultos a los condenados ha recibido una contundente descalificación del nuevo presidente de la Generalitat. "Sigue la línea represiva de la causa general contra el independentismo, por eso nosotros pedimos amnistía" ha señalado Pere Aragonés.

El líder independentista ha repetido una y otra vez que su objetivo es la amnistía y "el ejercicio de la autodeterminación", pero también ha dejado claro que los indultos serán bienvenidos. "Ante el dolor que representa la represión para los presos no nos opondremos a ninguna medida que pueda aligerar este dolor" ha argumentado.

Decisión "rápida y justa"

No sólo eso. Aragonès ha reclamado además celeridad a Pedro Sánchez. Espero, ha apuntado, que "la solución que se pueda tomar a raíz de este informe sea lo más justa y lo más pronto posible", recordando que ambos gobiernos tienen delante "un conflicto que resolver".

Aún así, el presidente catalán ha reiterado que "nuestra propuesta, la que genera consenso de mayoría de catalanes es la amnistía". Esa será el argumento que reiterará en los próximos días al presidente del Gobierno, con el que Aragonès confía en hablar telefónicamente en breve.

El Tribunal Supremo, que fue el encargado de juzgar la causa del procés, ha informado negativamente a la concesión de cualquier forma de indulto –total o parcial- a los 12 condenados por delitos de sedición, malversación de caudales públicos y de desobediencia. 

La Sala que preside Manuel Marchena se refiere en su informe al presidente de Òmnium Cultural, Jordi Cuixart, del que destaca que dijo ante la Sala que «todo lo que hizo lo volvería a hacer porque no cometió ningún delito». «Esas palabras son la mejor expresión de las razones por las que el indulto se presenta como una solución inaceptable», justifica el informe.

Nuevo Govern

Pere Aragonès ha presidido hoy la primera reunión del nuevo ejecutivo catalán, integrado por siete consejeros de ERC y otros tantos de JxCat, que han tomado posesión de sus cargos este miércoles. En el encuentro el nuevo president ha pedido a sus consejeros trabajar "incansablemente" para resolver el conflicto catalán.

Aragonès no ha mencionado los indultos en el acto de toma de posesión. Se ha referido, por contra, a trabajar por el ejercicio de la autodeterminación y la amnistía, y para impulsar la transformación que, a su juicio, necesita la sociedad catalana.

"Os quiero dar las gracias por comprometeros con el país, con vuestra vocación de servicio público. No es fácil implicarse ni asumir responsabilidades como la que hoy se os encomienda en un contexto como el actual y menos si la ambición compartida es romper con la mera gestión y comenzar a proyectar la Cataluña del futuro".