Un macrobotellón que ha reunido esta noche a miles de personas, en su mayoría jóvenes, en la Avenida Maria Cristina y la Plaza España de Barcelona y sus aledaños, ha derivado en numerosos actos vandálicos, especialmente en el Palacio de Congresos de la Fira, la quema de vehículos y peleas entre grupos que han provocado diversos heridos.

Por segunda noche consecutiva, y en el marco de las fiestas de la Mercè, a partir de la medianoche miles de jóvenes se han concentrado en esta parte de Barcelona, próxima a Montjuic, y han consumido bebidas alcohólicas y escuchado música a través de grandes equipos móviles que han instalado algunos de los participantes en el macrobotellón.

Al contrario que en la noche del viernes, en la que se reunieron unos 15.000 jóvenes sin que se produjeran incidentes, en esta ocasión se han producido graves altercados y actos vandálicos, incluido un asalto al Palacio de Congresos de Fira de Barcelona, que ha sufrido numerosos daños, como la rotura de vidrios en su fachada.

Cuando agentes antidisturbios de la Guardia Urbana se han personado en el Palacio de Congresos para acabar con los incidentes han sido atacados por algunos de los asaltantes con el lanzamiento de botellas de vidrio que han hecho retroceder a los agentes, según reflejan diversos vídeos publicados en las redes sociales.

Finalmente, hacia las cinco de la madrugada, se ha producido una intervención policial en la zona que ha logrado dispersar a quienes todavía permanecían en el lugar.

Según denuncian desde CSIF, se han producido 11 apuñalamientos, hurtos, daños en vehículos privados y policiales. También indican agresiones sexuales, quema de contenedores y daños en instalaciones municipales. En total, la policía ha detenido a 11 personas.

El área de la Avenida Maria Cristina y Plaza España ha amanecido con numerosos desperfectos en el mobiliario urbano, algunos vehículos quemados y gran cantidad de vidrios rotos y basura esparcidos por la vía pública, testimonio de la "batalla campal" en la que ha derivado el macrobotellón.

El teniente de alcalde de Cultura de Barcelona, Jordi Martí, elogió ayer la actuación "prudente" y "escrupulosa" de la Guardia Urbana y los Mossos d'Esquadra ante el primer macrobotellón en esta zona en la madrugada del viernes, al optar por controlar e "impedir cualquier violencia" en lugar de desalojar una gran concentración que a su juicio podía haber causado "males mayores".

Martí dio por hecho que los botellones se repetirán todas las noches de la Mercè, aunque manifestó su confianza en que la fiesta mayor se desarrollaría con normalidad.