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El informe psiquiátrico definitivo sobre el terrorista de Algeciras habla de un trastorno psiquiátrico derivado de la esquizofrenia

yihadista de Algeciras

La defensa de Yassin Kanjaa trata de sostener que el asesinato del sacristán en Algeciras el pasado mes de enero, lejos de ser un acto de terrorismo yihadista fue una acción fruto de un problema mental. El informe que dos médicos acaban de remitir a la Audiencia Nacional puede servir para apoyar esta tesis porque los psiquiatras concluyen que el marroquí sufre un "cuadro psiquiátrico derivado de la esquizofrenia", según cuentan fuentes jurídicas a El Independiente.

En un primer informe provisional (con fecha del 20 de febrero de 2023), los peritos de la Audiencia Nacional habían concluído que Kanjaa padecía un problema mental "compatible con un trastorno delirante". Él llegó a manifestar a los psiquiatras que en la cárcel estaba "rodeado de demonios", aseguró que sí volvería a hacer lo que había hecho y dijo no arrepentirse de haber acabado con la vida del sacristán de la Iglesia Nuestra Señora de Palma.

Con todo esto sobre la mesa, ese primer informe pericial solicitaba que se enviara a Kanjaa a un centro penitenciario psiquiátrico, que se pidiera información a Marruecos sobre los antecedentes mentales del joven y que se adjuntara su declaración frente al juez. La idea era con todo esto hacer una valoración completa.

Dos psiquiátras del hospital del centro penitenciario de Sevilla (donde ahora está interno) han rubricado ya el informe definitivo con fecha del pasado 3 mayo. En él señalan que padece un trastorno psiquiátrico compatible con una posible esquizofrenia y que, por tanto, en el momento de los hechos tenía las capacidades intelectivas y volitivas "muy severamente afectadas".

Es este hilo del que quiere tirar su defensa, liderada por el bufete Garía Peña & Andújar, para que el caso viaje desde la Audiencia Nacional a un juzgado ordinario en Algeciras, lugar donde se cometió el presunto acto terrorista. Si Kanjaa no se movía por mensajes yihadistas, sino enajenado por problemas mentales el delito de terrorismo como tal puede caerse.

El juez Joaquín Gadea despreció esta opción por el momento, ya que el primer informe psiquiátrico era provisional y los informes que constan en el sumario sí hablan de una radicalización de Kanjaa especialmente en los primeros meses de 2023. "No tiene por qué existir un vínculo directo entre el actor y un miembro de la organización. Es él quien decide la extensión de su compromiso, la duración del proceso y quien adopta la decisión final de cometer un atentado", dice uno de los informes de la Comisaría General de Información de la Policía Nacional.

Los abogados del marroquí han recurrido la decisión de Gadea a la Sala de lo Penal que está pendiente de resolver si, por tanto, la Audiencia Nacional es competente o no para continuar con el caso. Mientras tanto, los letrados han encargado ya un nuevo informe pericial de parte para ahondar en el problema mental del acusado e, incluso, las víctimas han requerido una tercera valoración forense. La Fiscalía ha informado a favor de todas ellas.

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