Pere Aragonès presentará el próximo lunes el informe del grupo de expertos reunido por su Govern para elaborar un dictamen sobre las bases de un Acuerdo de Claridad -emulando el caso del Quebec- para celebrar un referéndum de independencia. Un trabajo "académico", insisten desde el ejecutivo catalán, que estudia las vías para solucionar el "conflicto territorial" y propone cinco fórmulas de referendos, al tiempo que advierte de que cualquier consulta debe partir de un acuerdo con el Estado y el respeto al marco legal.

Se trata del informe encargado por Aragonès hace medio año, tras proponer la negociación de un acuerdo de claridad con el Gobierno como siguiente paso en la consecución de la independencia. El informe debía haberse presentado en junio, pero se pospuso por el calendario electoral hasta este otoño. Desde el Govern insisten en desvincularlo de la negociación de la investidura, pero también recuerdan que la opción de Aragonès "siempre ha sido un referéndum de independencia".

Por ello, el president no renuncia a una presentación del documento con todos los honores. El próximo lunes recibirá el dictamen en el Palau de la Generalitat, donde el director del trabajo, Marc Sanjaume, presentará las conclusiones en público. Paralelamente, Aragonès ha convocado una reunión extraordinaria del Ejecutivo catalán para oficializar la recepción del texto, tras el cual el propio president hará su particular valoración del texto.

Cinco opciones

"No habrá sorpresas" en esa valoración, apuntan desde el Palau, señalando que este mismo miércoles, desde Bolonia (Italia) Aragonès dejaba clara su postura: "El objetivo es un referéndum sobre la independencia y que se puedan aplicar los resultados". El presidente catalán hacía esta advertencia después de que se filtrara el contenido del informe, que dibuja cinco escenarios diferentes, que incluyen referéndums en el conjunto de España o una consulta sobre un acuerdo político que también podría referirse a un nuevo Estatuto.

El texto elaborado por los politólogos Mar Aguilera, Eva Anduiza, Marco Aparicio, Astrid Barrio, Pau Bossacoma, Elisenda Casañas, Lesley-Ann Daniels y Josep Lluís Martí, además de Sanjaume, fija cinco posibles referéndums. Un referéndum de inicio en el territorio subestatal -para consultar, por ejemplo, sobre el inicio del proceso con una reforma constitucional-; o uno de ratificación en el territorio subestatal -para consultar a la ciudadanía sobre un acuerdo político previo- serían los dos primeros.

Los expertos plantean además un referéndum de inicio en el conjunto del Estado -por ejemplo, sobre la reforma de la Constitución, para autorizar la consulta en Cataluña-. La cuarta opción plantea un referéndum de ratificación en el conjunto de España, y la quinta combina las dos anteriores, planteando dos referéndums paralelos en el territorio subestatal y el conjunto de España.

El texto destaca, además, que el referéndum no es la única vía para la resolución de conflictos territoriales. "Ni siquiera es la mejor" apuntan voces en el seno del Consejo de Expertos, que apuntan que los resultados pueden generar también problemas de aplicación. Para el Govern, sin embargo, el dictamen demuestra que "el referéndum está en el centro" de cualquier solución para el problema territorial catalán.

Rechazo de Illa desde Bruselas

Sin embargo, el líder del PSC, Salvador Illa, dejaba clara la oposición de los socialistas a estas fórmulas poco después de hacerse públicas. "Con todo el respeto por el trabajo hecho, no estaremos de acuerdo con nada que signifique ahondar en la división y ruptura de la sociedad catalana", advirtió.

Lo hizo a las puertas del Parlamento Europeo, donde Illa se encuentra en una vista de dos días en la que no piensa mantener ningún encuentro con Carles Puigdemont, han asegurado los socialistas. El líder del PSC aseguró que la diversidad de fórmulas propuestas por los expertos reunidos por la Generalitat no convencerán a los socialistas de celebrar una consulta sobre la independencia.

Illa se desmarcó también de la propuesta de ley de amnistía avanzada por Sumar este martes en Barcelona. "Respeto las iniciativas de otros grupos, pero no es la nuestra", advirtió, en línea con lo afirmado por el ministro de Presidencia, Félix Bolaños, que lidera la negociación para la investidura desde el PSOE.