El pasado domingo las calles de Sevilla vivieron momentos de alta tensión durante una pelea de ultras del Betis y el Osasuna. Armados con palos y baras de metal de futbolines, los integrantes de ambos grupos protagonizaron una batalla campal. Los vecinos grabaron momentos de la pelea, en los que se puede ver a individuos lanzando cohetes y bengalas contra sus adversarios. La Policía tuvo que intervenir.

En uno de los vídeos se puede ver como un hombre en el suelo es agredido con palos de madera mientras está tendido en el suelo. Indefenso y expuesto a las agresiones, el lichamiento sólo paró cuando se presentaron varios efectivos de la Policía Nacional. El resultado fue una herida sangrante en una ceja y la pérdida de un diente. El hombre tuvo que ser trasladado a un centro sanitario.

Los incidentes se produjeron en las inmediaciones del Benito Villamarín, estadio del Betis. Allí se encontraban patrullando la zona varios coches policiales. Fue entonces cuando los policías se percataron de la pelea entre ambos grupos e intervinieron. Las primeras investigaciones permitieron identificar a los ultras del Betis (probablemente de Indar Gorri) y a los del Betis (United Family y Supporters Gol Sur). Los agentes investigan lo sucedido y apuntan a que habrá detenciones en los próximos días.

En el mundo ultra hay dos tipos de enfrentamientos: las drakas (traducción literal de 'pelea' en ruso) y las convencionales. Las primeras tienen su reglas, e incluso árbitros. Aquí no se permiten armas ni utensilios peligrosos, se realizan en campo abierto y enfrentan a un mismo número de personas por bando. La de Sevilla fue de las segundas, en las que todo vale para hacer el mayor daño al rival.

Grupos violentos

Los dos grupos mencionados relacionados con el Betis han sido los últimos en incorporarse a la lista de grupos radicales aprobada por la Comisión Permanente de la Comisión Estatal contra la Violencia, el Racismo, la Xenofobia y la Intolerancia en el Deporte. Se añadieron a principios de octubre tras los análisis de la Oficina Nacional del Deporte (OND) de la Comisaría General de Seguridad Ciudadana de la Policía Nacional. Según los investigadores, ambos "han participado en hechos violentos" y no deben tener acceso a estadios de fútbol.

En lo que va de año la Policía Nacional ha realizado varias detenciones entre miembros de estos grupos radicales, interviniendo todo tipo de material peligroso, todo ello enmarcado dentro de los operativos destinados a combatir este tipo de actividad delincuencial y control de estos colectivos.

Los agentes calculan que en España hay unos 10.000 miembros de grupos ultras. Preocupa que los nuevos integrantes son cada vez son más jóvenes.