El PNV ha iniciado el proceso de reparación de daños. El presidente de la formación, Andoni Ortuzar, ha iniciado una ronda de entrevistas con las que explicar lo sucedido desde el pasado viernes en el que se precipitó tras la filtración de que Urkullu no sería propuesta como candidato y la designación de Imanol Pradales para sustituirle como propuesta de la dirección. "Nosotros no hemos prescindido de Urkullu", ha asegurado Ortuzar, "es una sucesión más que quitar a alguien": "Esto se quiere llevar a un debate que no es real".

Ortuzar ha explicado esta mañana que el partido tenía elaborado desde hace meses un "retrato robot" de lo que se requeriría para las próximas "dos o tres legislaturas" y en ese perfil no encajaría la figura de Urkullu por, entre otras, cuestiones generacionales. Ha apuntado que tras un profundo análisis "vimos que era conveniente una nueva generación" para abordar los retos de los próximos años: "El retrato robot era el que era. No hemos decidido quién no es, hemos decidido quién es".

Ha señalado que la decisión de que Urkullu no sería la propuesta del EBB la conocía "muy poca gente" y que está convencido de que la filtración no salió del PNV, "el primer contrariado fue el partido e imagino que las bases por enterarse de ese modo", ha afirmado en declaraciones a Radio Euskadi. Ha añadido que los hechos se precipitaron a partir de ahí, pese a que restaban "muchas reuniones aún" para tomar la decisión pero que fue el sábado cuando se decidió y comunicó la propuesta de Imanol Pradales.

El presidente del PNV ha apuntado que su perfil responde a lo que se considera necesario para el futuro: "Responde a una generación más joven que la que yo represento, alguien con experiencia contrastada, en política y en gestión, alguien que sepa moverse en el ámbito internacional, plurilingüe y que tenga conocimiento de la política institucional y de partido".

Ha reconocido que detrás del mal resultado de las elecciones generales y municipales no está el desgaste del Gobierno vasco que lidera Urkullu "sino un desgaste de marca, es algo más global": "No es el momento de repartir culpas sino de hacer tareas conjuntas. Nos toca responder a las expectativas de esa gente que nos ha mandado un mensaje".

Un partido "hiperdemocrático"

El presidente jeltzale ha asegurado que ahora serán las bases las que tendrán que ratificar la propuesta de la dirección. En varias ocasiones ha asegurado que quiere ser muy respetuoso con el proceso "hiperdemocrático" que aplica el PNV, con elección de posibles candidatos a doble vuelta. No ha dejado de destacar la figura de Pradales del que ha asegurado que "sorprenderá" y que pese a ser muy desconocido "el grado de conocimiento es algo que se va construyendo": "Es un candidato fiable", ha afirmado.

Respecto a su continuidad al frente de la formación, ha señalado que dependerá de las bases. "Llevo desde 1976 afiliado. La gente tomará la decisión y yo abriré la puerta el primero si la gente cree que es lo mejor para el partido". Si ha señalado que el futuro corresponde a una generación más joven que la suya, "nosotros ese futuro lo viviremos como pensionistas".

En relación al anuncio hecho por Otegi de no optar a ser candidato a lehendakari, Ortuzar considera que se trata de una decisión que en gran medida ha estado marcada por el anuncio de la candidatura en el PNV, "ellos han estado retrasando la decisión hasta conocer la nuestra. Respecto a la calificación de partido "desgastado" que el secretario general del PSE, Eneko Andueza, hizo del PNV, Ortuzar ha apuntado que "para estar desgastados siempre está muy cerca de nosotros, siempre abjuran de nosotros cuanod llegan las elecciones": "Yo apuesto 1.000 a 100 que Eneko se cambiaría por la posición que tiene hoy el PNV".