La investigación que afecta al exasesor de Transportes Koldo García y a distintos empresarios ha desbordado los medios de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil por la cantidad de material intervenido, lo que ha llevado a los agentes a solicitar la cooperación de Europol. El último informe pone cifras: la Unidad custodia ya más de 170 dispositivos digitales. Del análisis de esa ingente cantidad de información, el juez de la Audiencia Nacional podrá decidir si escala las pesquisas y termina imputando a más responsables de la Administración por la compra fraudulenta de mascarillas en plena pandemia.

La causa que cristalizó el pasado mes de febrero con las detenciones del que fuera mano derecha del ministro José Luis Ábalos y parte de su familia, alcanza ya al menos cinco ramificaciones distintas, es decir, cinco piezas separadas de una misma investigación que no lleva ni un año judicializada. En cada entrada y registro (casi una veintena), los agentes de la UCO han intervenido ordenadores y teléfonos móviles que aún están analizando y por el momento, según este último escrito policial al que ha tenido acceso El Independiente, han sido ya clonados 76.

Los guardias civiles van escudriñando poco a poco todas las conversaciones e hilando los mensajes con las citas y las contrataciones que se hicieron en el seno del Ministerio para esclarecer los delitos bajo el foco: tráfico de influencias, blanqueo de capitales y contra la Hacienda Pública, cohecho y organización criminal. De ahí, de ese examen pausado, que este reciente informe vincule a una nueva persona a la trama: el presidente de Adif, Ángel Contreras Marín. La UCO le otorga un papel en el supuesto amaño de una adjudiciación de Transportes, si bien está por ver qué papel le da el juez Ismael Moreno.

"Ángel sabe que nos ha quitado 600.000€ en esa obra y debe ayudarnos pero ya sabes. Ya hablaremos de los detalles", le dijo el empresario Daniel F. (administrador de la sociedad Obras Públicas y Regadíos SA y que no está implicado por el momento en la trama) a Koldo el pasado mes de febrero. El Instituto Armado destaca esta conversación y recuerda que Contreras era director general de Conservación y Mantenimiento de Adif en 2020 cuando se adjudicó el contrato de 12,5 millones de euros en mascarillas que es el origen de este procedimiento en la Audiencia Nacional.

El sumario salpica a las administraciones de Canarias y Baleares, además de al Ministerio del Interior, pero, por el momento, no hay ningún imputado de la Administración más allá de Koldo García de quien algunas fuentes jurídicas discuten, incluso, que su papel al lado de Ábalos pueda considerarse legalmente un rol público. El análisis de toda la documentación nueva será, por tanto, determinante para el devenir de las pesquisas y para dimensionar hasta dónde llegaban los tentáculos de la red presuntamente corrupta.

Por ello, se ha requerido ayuda europea. "Teniendo en cuenta el volumen de dispositivos informáticos pendientes de que su contenido sea clonado y extraído, se informa de que está previsto el apoyo técnico de Europol para la prestación de medios técnicos que permitan agilizar las tareas, autorizadas bajo mandamiento judicial, de acceso, clonado y extracción de la información contenida en los dispositivos digitales", anticipa la UCO.

Un móvil en el coche de Aldama

Los agentes han pedido autorización para clonar, además, algunos nuevos móviles que han ido apareciendo tras las detenciones y que no estaban previstos. Entre ellos, uno de Víctor de Aldama, uno de los empresarios clave, dueño de Soluciones de Gestión S.L, la sociedad que se llevó el grueso del dinero de las mascarillas. Lo encontraron en un Volkswagen Golf tras la retirada del vehículo del taller.

El nuevo informe de la UCO señala que se ha encontrado un teléfono en el coche de Víctor de Aldama
El nuevo informe de la UCO señala que se ha encontrado un teléfono en el coche de Víctor de Aldama

"Se solicita que, en caso de localizar un repositorio telemático de datos durante el análisis de los efectos informáticos anteriores, se libre autorización para la visualización, registro, acceso, clonado y extracción de la información contenida en los mismos", reclaman los agentes. Sólo en el caso de Koldo García, la Guardia Civil cuenta con cuatro dispositivos distintos.