El Juzgado de Instrucción número 5 de Bilbao ha acordado, en una resolución conocida este martes, prohibir a las ocho exmonjas cismáticas del monasterio de clarisas de Belorado (Burgos) que se acerquen a sus antiguas hermanas como medida de protección, dada la avanzada edad de estas últimas.

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La prohibición, adoptada como medida cautelar, se extiende también a los abogados y procuradoras que representan a las exreligiosas disidentes. Así lo ha comunicado la Oficina del Comisario Pontificio, organismo designado por la Santa Sede para gestionar el cisma y encabezado por el arzobispo de Burgos, Mario Iceta.

Alta hospitalaria

Por otro lado, dos de las monjas de mayor edad de Belorado que no fueron expulsadas y continúan observando la regla han recibido el alta hospitalaria este martes por la tarde en el Hospital Universitario de Basurto, en Bilbao. Ambas habían sido trasladadas el pasado 18 de diciembre desde el convento de Orduña (Vizcaya), junto a otras tres compañeras, por orden judicial para evaluar su estado de salud según EFE.

Según el comunicado, las religiosas permanecían ingresadas desde entonces debido al "grave deterioro" que presentaban, consecuencia de las "condiciones insalubres, precarias y deficitarias" en las que vivían, tal y como ellas mismas manifestaron. Una tercera monja continúa hospitalizada a la espera de recibir el alta en los próximos días, mientras que las otras dos no precisaron ingreso.

Las cuatro religiosas que no se encuentran hospitalizadas pasarán las fiestas navideñas en algunos de los catorce monasterios que la Federación de Clarisas Nuestra Señora de Aránzazu tiene en España, donde permanecerán "bajo el cuidado y el cariño" de las comunidades monásticas que las acogen.

Demanda inadmitida

En otro orden de cosas, el Tribunal de Instancia de Briviesca (Burgos) ha inadmitido la demanda por vulneración de derechos fundamentales presentada por las exmonjas cismáticas contra el arzobispado de Burgos tras su expulsión de la Iglesia Católica. El auto fue firmado el pasado 19 de diciembre.

Ese mismo día, el Juzgado de Primera Instancia número 11 de Bilbao decretó además que carecen de personalidad jurídica las entidades autodenominadas Asociación Monasterio de Santa Clara de Belorado y Asociación Monasterio de Santa Clara de Derio, creadas por las exmonjas para defender sus supuestos derechos fundamentales de libertad religiosa, asociación e igualdad.

Al no existir legalmente dichas asociaciones, las exreligiosas no pueden otorgar poderes de representación. En este sentido, queda acreditada la incapacidad de Laura García de Viedma, designada por ellas como representante legal, tal y como ya había determinado el Tribunal Superior de Justicia de Madrid y ratificado posteriormente el Tribunal Supremo.

Como consecuencia de estas resoluciones, las disidentes no podrán personarse en el procedimiento de desahucio del monasterio de Derio, y las citadas asociaciones quedan excluidas del proceso de resolución del contrato de compraventa del monasterio de Orduña. La solución de este último asunto, según la Oficina del Comisario Pontificio, queda supeditada a un posible acuerdo entre el propio comisario pontificio y el Monasterio de la Inmaculada de Vitoria.

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