Por norma general, Google es una empresa un tanto aburrida. Sus presentaciones suelen pecar de sobriedad, casi como si se tomaran demasiado en serio ser el mayor gigante de internet del mundo. Pero en su conferencia de desarrolladores de este año, que comenzó este miércoles en California, se han dejado llevar y han deslizado el nuevo rumbo de la compañía: dominar la Inteligencia Artificial.

Mientras pasaban las horas e iban desfilando los ponentes por el escenario de la multitudinaria conferencia, celebrada en el Shoreline Amphitheatre de Mountain View, nos iban confirmando que todo el universo Google va a estar conectado gracias a los avances en Inteligencia Artificial que se van a materializar en todos los productos de la compañía, empezando por el Google Assistant.

Es uno de los miembros más recientes de la familia, pero el asistente virtual ya tiene un importante peso específico. De aquí a final del 2017 estará en todos los dispositivos Android y empezará a tomar más protagonismo del que ahora tiene dentro de las versiones más avanzadas del sistema operativo de Google.

Para empezar hay un paso muy importante: quiere conquistar el iPhone. Pese a que Apple tiene su propio asistente virtual, la famosa Siri, Google Assistant va a estar presente en el sistema operativo iOS antes de que echemos el cierre a 2017. La idea es que ejerza sus funciones de búsqueda y consulta para el usuario, dejando para Siri todas las funciones propias del iPhone como la fijación de las alarmas.

Teniendo en cuenta que Siri seguirá activa y funcionando como hasta ahora, ¿por qué les usuarios de Apple deben pasarse al Google Assistant? Sencillo: todos estamos tan conectados al universo Google que será complicado no hacerlo. Quien más quien menos ya utiliza Gmail, Google Calendar, Google Maps... cualquiera de los servicios del gigante de internet. Su interacción con el asistente es sencilla y nos facilitará las cosas.

También Google Home va a recibir un buen impulso, si tenemos en cuenta lo que se ha hablado durante la conferencia de desarrolladores. Parece lejos el momento en el que se lance a competir directamente con Alexa, por lo que de momento Google se va a limitar a seguir añadiendo aplicaciones y funcionalidades a su propio asistente del hogar. Google Home sí permitirá hacer llamadas telefónicas, utilizar Chromecast... todo mientras su algoritmo sigue aprendiendo del comportamiento de sus usuarios para ofrecerles información antes incluso de que la soliciten.

Más cámara

Google planea darle más trabajo a la cámara de nuestros smartphones. Más allá de sus funciones habituales, antes de que acabe el año actual podremos utilizar herramientas como la de apuntar con el objetivo a la cartelera de un cine o un teatro y que Google nos informe de horarios y de la forma más rápida de conseguir entradas, o incluso que nos enseñe un trailer de la película u obra que queramos ver.

Otra de las funcionalidades más interesantes, que también la ha dejado entrever el Bixby de Samsung, es la de reconocer textos o números a través de la cámara. De esta manera podremos apuntar con la lente a la contraseña de una clave WiFi y que la Inteligencia Artifical de Google se encargue de conectarnos directamente, evitándonos tener que introducir la engorrosa serie de números que viven en la parte trasera del router.

Por supuesto, la cámara seguirá teniendo sus funciones habituales de captura de imágenes. Y ahí entra en juego Google Photos, una de las aventuras que mejor le está saliendo a la compañía dirigida por Sundar Pichai. En sus dos años de vida ya acumula más de 500 millones de usuarios, que suben más de 1.200 millones de fotos al mes, ofreciendo a cualquiera almacenamiento gratis y en alta calidad de todas sus imágenes.

Nuevo Android

Google también ha presentado una nueva versión de su sistema operativo para dispositivos móviles, que ha quedado bautizado como Android O y cuya versión beta ya empieza a estar disponible.

Es una evolución que a nivel gráfico no presenta novedades muy significativas, pero que pone el foco en pequeñas cosas que el usuario irá descubriendo de manera natural que están ahí. Entre sus mejoras más identificables está el manejo de la batería, con una reducción del gasto de las aplicaciones que funcionan en segundo plano, o la rapidez a la hora de arrancar.

La compañía también aprovechó para anunciar que ya tiene más de 2.000 millones de dispositivos activos al mes que funcionan con Android, lo que convierte al sistema operativo de Google en el más popular del mundo. Han pasado 18 meses desde que alcanzaran los 1.000 millones de dispositivos, por lo que el crecimiento es significativo.