Honor acaba de presentar su nuevo smartphone, capaz de competir por especificaciones técnicas con la mayoría de los dispositivos que están en el mercado. Es el Honor 9, que sigue los pasos de su antecesor en cuanto a diseño, pero que ha recibido buenas mejoras en el plano del rendimiento.

En cuanto al hardware, el aspecto sigue siendo el de un terminal de alta gama. La parte trasera tiene materiales de calidad y un efecto espejo que, con el azul potente habitual de la marca, le da una apariencia que bien podría corresponder a la gama alta.

Dentro de las especificaciones técnicas, la primera que salta a la vista es que el sensor de huella dactilar, que anteriormente estaba en la parte trasera, se ha trasladado al frontal muy al estilo de lo que Huawei hizo con el P10.

La pantalla es de 5,2 pulgadas con Full HD, sólo un poco por detrás de las calidades que despliegan los móviles top. El procesador es el Kirin 960, el mismo que el Huawei P10, y cuenta con 6GB de RAM y 64GB de almacenamiento, ampliables hasta 256 GB con tarjetas de memoria. Con estos niveles de memoria no habrá problemas para soportar el fuerte aumento del peso de las aplicaciones en los últimos años.

La cámara es una de las características a las que más horas le han dedicado los ingenieros de Honor. La parte trasera cuenta con una cámara doble, la principal con 12 megapíxeles y la de apoyo con un sensor de 20 megapíxeles que le dan una buena capacidad para hacer fotos con poca luz y para tirar de zoom sin perder calidad. También han mejorado el modo retrato. En la parte frontal la cámara alcanza los ocho megapíxeles, calidad de sobra para los selfies.

El Honor 9.

Vista trasera del Honor 9.

El Honor 9 ya se puede comprar en Vmall, la tienda online de Huawei y Honor, por un precio de 450 euros y un envío en apenas tres días. Además, la marca incluye de regalo una banda de actividad de la marca.

La nueva creación de la firma japonesa es una opción perfecta para aquellos que buscan características y alto rendimiento pero que no están dispuestos a afrontar los 700 u 800 euros que cuesta, como mínimo, un terminal de alta gama. Potencia les va a sobrar.