El primer vuelo de prueba del nuevo cohete gigante de Space X en enero de 2018, el cohete Falcon Heavy, tendrá como destino la órbita de Marte y en su zona de carga llevará un Tesla. El anuncio realizado por Elon Musk por Twitter pone en primer plano a su marca de coches frente a la multimillonaria apuesta espacial de Space X, que según el propio Musk, tiene muchas posibilidades de fallar según ha dicho en repetidas ocasiones.

"Falcon Heavy se lanzará el próximo mes desde la plataforma del Apolo 11 en Cabo Cañaveral", escribió Musk. "Tendrá el doble empuje del próximo cohete más grande. Garantizado para ser emocionante, de una forma u otra", dijo Musk en un primer tuit.

"La carga útil será mi Tesla Roadster modelo midnight cherry reproduciendo Space Oddity", agregó Musk en un segundo tuit. De acuerdo, eso es salvaje. Pero luego está lo siguiente, agregó.

"El destino es la órbita de Marte", escribió Musk. "Estará en el espacio profundo durante mil millones de años más o menos si no explota en el ascenso". Whoa! Ese Roadster va a acumular muchas millas si llega al Planeta Rojo.

Un cohete reutilizable

El cohete Falcon Heavy de SpaceX es un vehículo de lanzamiento pesado que utiliza dos primeras etapas Falcon 9 alrededor de un núcleo central, que a su vez es un Falcon 9. Con 70 metros de altura de altura está diseñado para lanzar cargas útiles de hasta 57 toneladas métricas - el equivalente a un avión de pasajeros Boeing 737 - por lo que un solo Tesla Roadster no es un reto para el cohete.

El cohete será el lanzador estadounidense más poderoso desde el famoso cohete lunar Saturno V de la NASA. Además, está diseñado para ser reutilizable, ya que sus impulsores están diseñados para volar de regreso a la Tierra, al igual que las primeras etapas del Falcon 9.

Musk ha insistido repetidamente en que hay una buena posibilidad de que la primera prueba de cohete Falcon Heavy pueda fallar. A principios de este año, dijo que había un "factor de fruncimiento importante" para el primer vuelo de Falcon Heavy. El cohete es tan complejo que podría salir mal en su primer lanzamiento, explicó el fundador y CEO de SpaceX, citado por Space.com.