El Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos ha empezado a seguir la evolución de la borrasca que se aproxima a la Península Ibérica. A lo largo de los próximos días, el ciclón podría llegar a albergar rasgos tropicales mientras se desplaza hacia el sur y sureste, sobre aguas más cálidas.

Actualmente sobrevuela una superficie del océano bastante fresca, con temperaturas que apenas rondan los 20 ºC. Sin embargo, entre mañana y el jueves irá bajando de latitud, encontrándose con una parcela bastante más cálida. Según los análisis del Departamento de Meteorología de Meteored, al este del archipiélago azoriano el Atlántico ronda los 22 o 24 ºC, unos registros que podrían favorecer la aparición de características tropicales o subtropicales en el sistema.

En principio, la probabilidad de que la borrasca acabe adquiriendo esas características y un nombre de la lista contemplada para los huracanes en las próximas 48 horas es baja, del 10%, aunque entre el jueves y el viernes aumentará hasta el 20%. Ayer apareció la tormenta tropical Vicky y ahora hay dos tormentas en seguimiento que optan al nombre de Wilfred, que es el último de los nombres previstos. La temporada de huracanes está siendo tan activa que pronto obligará a utilizar el alfabeto griego (Alpha, Beta, Gamma…).

Análisis de Francisco Martín, meteorólogo de Meteored

“En las últimas horas la borrasca atlántica, conducida por un chorro polar en niveles altos de componente norte, se ha aislado y sufrido un proceso de ciclogénesis rápida. En su profundización, ha atraído una lengua de aire cálido y húmedo hasta el centro de la depresión en niveles bajos, produciéndose una ‘seclusión cálida’.

En las imágenes de satélite se aprecian señales de los cambios que está experimentando la borrasca. Los frentes asociados se están alejando de su centro, el máximo de viento en altura se está debilitando y en las capas bajas están creciendo potentes nubes de tormenta que rotan alrededor del mínimo depresionario, aumentando así los vientos en capas bajas. Todo esto invita a pensar que se está produciendo un proceso de subtropicalización”.

En las próximas horas la borrasca tomará un aspecto parecido al de los huracanes Paulette o Sally. Aunque su potencia será infinitamente inferior, las nubes podrían acabar rotando alrededor de un ‘ojo’, según traza el modelo utilizado por los expertos de Meteored. Todo esto mientras pone rumbo hacia la Península Ibérica, donde está previsto que llegue el viernes, entrando probablemente por Lisboa. A su paso podría dejar lluvias importantes de hasta 100 l/m2 en puntos de Galicia y del Sistema Central.