Bomberos desplazados a La Palma desde Gran Canaria, Tenerife y Lanzarote están trabajando a destaco para desviar la lava allí donde pueden. "Es una operación baja probabilidad de éxito pero ya hemos conseguido salvar algunas viviendas", asegura Emilio Duch gerente del consorcio de Emergencias de Gran Canaria cuyo personal está sobre el terreno.

Las actuaciones de los bomberos están siendo puntuales "cuando determinan que levantando terreno, derribando algo o modificando el entorno de alguna manera pueden salvar una vivienda, lo hacen", asegura Emilio Duch.

Si bien las operaciones son difíciles de acometer y las posibilidades de conseguirlo son pocas los bomberos allí desplazados no dejan de intentarlo. De momento, aseguran que se ha conseguido en un número indeterminado de casos.

Una de las operaciones en marcha por los bomberos desplegados en Todoque es abrir una vía para que la lava se derive por un barranco "donde creemos que ganaría velocidad la lava sin afectar viviendas y desviaría más lava", de esta manera se evitará que la colada penetrara más por la localidad". La intención según el responsable de Emergencias es "Salvara la Iglesia y la escuela".

Para la operación están contando con los técnicos del Instituto Volcanológico de Canarias (Involcan). El asesoramiento de ellos es fundamental ya que ellos conocen mejor que nadie el comportamiento de la lava. Su portavoz David Calvo nos reconocía estos día que esa posibilidad estaba sobre la mesa ya que hay experiencias previas. “En Islandia se han hecho barreras de contención, montículos de piedras de gran altura y anchura y se ha conseguido que, al menos, no baje por algunos valles poblados”. El vulcanólogo subrayaba la dificultad técnica de la operación porque es "luchar contra la naturaleza de tú a tú".