El terremoto que esta madrugada ha causado miles de muertos y heridos en el sur de Turquía y norte de Siria ha tenido una magnitud de 7,8.  A los 11 minutos fue seguido por una réplica de magnitud 6,7. El sismo es el resultado de fallas de deslizamiento a poca profundidad y la ubicación preliminar del terremoto lo sitúa en la vecindad de una unión entre las placas de, Eurasia, Anatolia, Arabia y África. La actividad sísmica es tan grande en el país que se ha producido otro segundo terremoto, que según los expertos no se trata de una réplica, sino de un gran sismo de una magnitud de 7,5.

“El terremoto ha ocurrido en lo que se conoce como Falla de Anatolia Este (EAF). Las soluciones que he visto indican este origen. Esta falla y sus segmentos tienen una longitud de unos 700 kilómetros y es una falla importante que ha tenido sismos históricos destructivos", explica José Morales, catedrático de Física de la Tierra del Instituto Andaluz de Geofísica y de la Universidad de Granada en declaraciones a Science Media Center. "Esta falla acomoda la deformación que se produce entre la placa de Arabia y Eurasia como consecuencia del movimiento de la placa de Arabia hacia el norte. La otra gran falla de Turquía es la Falla de Anatolia Norte (NAF) que es responsable también de grandes sismos como el de Izmit de 1999 de Mw=7.4. El de hoy es más grande y es uno de los mayores que ha sufrido en esa región", añade.

El mecanismo y la ubicación del terremoto son consistentes con el terremoto que ocurrió en la zona de falla de Anatolia Oriental o en la zona de falla transformante del Mar Muerto. La falla de Anatolia del Este acomoda la extrusión hacia el oeste de Turquía hacia el Mar Egeo.

Mapa de Turquía con el sismo según el sistema de avisos sísmicos de EEUU.
Mapa de Turquía con el sismo según U.S. Geological Survey.

Aunque los terremotos se representan comúnmente como puntos únicos en un mapa, rompen planos que tienen dimensiones, como se puede ver en el mapa. "Un terremoto empuja una falla de 250 km de largo por unos 25 km de ancho. Esto se ve muy bien con las réplicas que se van acumulando en esa línea", afirma Arantxa Izquierdo sismóloga de la Red Sísmica Nacional del Instituto Geográfico Nacional.

La región donde ha tenido lugar el terremoto es sísmicamente activa. Tres terremotos de magnitud 6 o más han ocurrido dentro de los 250 km de este terremoto desde 1970. El mayor de ellos, de magnitud 6,7, ocurrió al noreste del terremoto del 6 de febrero el 24 de enero de 2020. Todos estos terremotos ocurrieron a lo largo o en las proximidades de la falla de Anatolia Oriental. 

A pesar de la relativa quietud sísmica del área epicentral del 6 de febrero, el sur de Turquía y el norte de Siria han experimentado terremotos significativos y dañinos en el pasado. Alepo, en Siria, fue devastada históricamente varias veces por grandes terremotos, aunque las ubicaciones precisas y las magnitudes de estos terremotos solo pueden estimarse. Alepo fue golpeada por un terremoto de magnitud estimada 7,1 en 1138 y un terremoto de magnitud estimada 7,0 en 1822, según información sísmica estadounidense (U.S. Geological Survey).

"Cuando en una zona sísmica no se producen terremotos durante tiempo no es una buena noticia, tampoco cuando se produce. Pero el tiempo que no hay terremoto se está acumulando esfuerzo en la placas por lo que son más potentes", explica la sismóloga de la Red Sísmica Nacional.

Mapa de Turquía con un histórico de los sismos y el epicentro del terremoto de hoy.
Mapa de Turquía con un histórico de los sismos y el epicentro del terremoto de hoy.

En este sentido hay un temor conocido sobre que se produzca un gran terremoto en Estambul. Hace 20 años, la ciudad de Izmit sufrió un terremoto que mató a más de 17.000 personas. Desde entonces, las autoridades de Estambul han reforzado las directrices de construcción, pero la ciudad histórica de Estambul con 15 millones de habitantes es muy vulnerable a un big one, un gran terremoto, que dejaría una altísima cifra de fallecidos.