La densa calima que ha empezado este sábado a afectar a Canarias y que se prevé que aumente en las próximas horas, por lo que se ha activado una prealerta, ha obligado a desviar tres vuelos que pretendían aterrizar en Lanzarote, según han confirmado a Efe fuentes de Aena.

Estas incidencias en la operativa del aeropuerto lanzaroteño han tenido lugar sobre el mediodía, ante una notable reducción de la visibilidad por una importante presencia de polvo en suspensión, si bien el aeródromo ha seguido funcionando con normalidad, han precisado las fuentes del ente.

Los vuelos que han tenido que ser desviados a otras islas han sido uno de Vueling procedente de Barcelona y otro de Ryanair que partió de Reino Unido, y que finalmente han aterrizado en Fuerteventura.

Otro vuelo interinsular procedente de Tenerife Norte ha tenido que regresar a esa isla ante la imposibilidad de hacerlo en Lanzarote.