El ecosistema natural del Mar Menor sigue siendo tan complejo como el ecosistema político que lo gestiona. Un año después de la sopa verde que causó una mortandad masiva de la vida marina de la laguna salada más grande de Europa la situación es mejor. ¿Cuánto mejor? El enfermo continúa débil y un episodio como una DANA o gota fría podría conducir de nuevo al desastre. Ecologistas y autoridades son cautelosos hasta cuando interpretan datos positivos.

El agua está turbia, pero menos, tiene más oxígeno y menos clorofila que es el elemento clave para que se produzca la eutrofización, la sopa verde. El Instituto Murciano de Investigación y Desarrollo Agrario y Medioambiental (IMIDA) ha detectado este verano niveles normales de oxígeno en 115 de los 123 puntos analizados este lunes entre Punta del Galán y Estrella de Mar, en el Mar Menor.

El portavoz del Comité de Asesoramiento Científico, Emilio María Dolores, también ha destacado este verano que "los datos que tenemos actualmente son aceptables para la época del año en que nos encontramos, si bien hay que ser cautelosos durante las próximas semanas", en declaraciones recogidas por Europa Press.

Una mejora que subraya Pedro García de ANSE, la organización ecologista de referencia de Murcia: “La situación de la laguna es significativamente mejor que la del año pasado, según los parámetros del Instituto Español de Oceanografía. Está mucho menos turbio que el año pasado en esta época, en general hay más oxígeno disuelto en el Mar Menor y hay menos clorofila”. asegura.   

Sin embargo, como denuncian los promotores de la Iniciativa Legislativa Popular (ILP) que persigue dotar de personalidad jurídica al Mar Menor la “Rambla del Albujón es un río, no una rambla'. Por ahí sigue entrando agua con nitratos al Mar Menor, por eso nos vamos a concentrar ahí mañana [por hoy sábado]” afirma Rocío García, portavoz de esta organización popular. Este punto de la laguna es considerado clave porque por esta rambla entra, constantemente, agua dulce procedente del riego de la agricultura cargada de nitratos.

“La forma de interpretar la mejora del mar -si se quiere hacer en base de datos científicos rigurosos- es muy difícil de saber. Por qué el año pasado hubo sopa verde y este año no, cuando en el mar está entrando caudales en similares por el Albujón y ha habido olas de calor importantes que han llevado al agua a temperaturas de récord y la concentración de nitratos sigue siendo parecida”, se pregunta el responsable de ANSE.

El ecologista afirma que el Mar Menor ha reaccionado de manera diferente a como hizo el año pasado. En lugar de una sopa verde ha habido un desarrollo constante en la zona de la costa de algas filamentosas que se llaman cabello de ángel y sin embargo no ha habido fitoplancton. Estaría bien que hubiese un grupo de investigadores que fuera capaz de hacer seguimiento de este tipo de fenómenos”, asevera. “Hace 25 años pasó con las poblaciones de medusa, que desaparecieron.  Los ecosistemas naturales se alteran, cambian y muchas veces no se sabe porque. Ahora mismo no hay nada que lo explique”, añade.

Rambla del Albujón en 2021, cuando se produjo al sopa verde.
Rambla del Albujón en 2021, cuando se produjo al sopa verde.

El ecosistema político, respecto a como estaba hace un año, también está menos turbio. La administración autonómica (PP) y la nacional, el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITECO) (PSOE y coalición) se sientan comparten ideas, aunque discrepan. La mejor foto de este mayor entendimiento se produjo en julio pasado cuando arrancó la Oficina Técnica del Mar Menor en la que trabajan que inauguró la ministra Teresa Ribera acompañada del presidente regional Fernando López Miras. Ambas administraciones han subrayado sus acciones en este último año de cara a evitar una nueva sopa verde. 

El ministerio de Ribera apunta al dato del cierre de 5.500 hectáreas de regadío de las cuales 3.700 de esas hectáreas se han clausurado voluntariamente por los propietarios. Quedan por tramitar todavía las otras 3.000 hectáreas identificadas. Murcia ha obligado a restituir 612,6 hectáreas de cultivos sin derecho de riego en el Mar Menor pertenecientes a 61 expedientes sancionadores comunicados por MITECO.

Es la primera vez que terreno de regadío intensivo se transforma en secano".

PedroGarcía, ANSE

La Comunidad ha realizado hasta el 2 de agosto de 2022 un total de 743 inspecciones sobre 12.932 hectáreas correspondientes a 240 expedientes, y, como resultado de las sanciones, ha percibido ya 307.038 euros. Además, ha iniciado el 100% de los 282 expedientes recibidos (que afectan a 4.344 hectáreas) por parte de la Confederación Hidrográfica del Segura (CHS, dependiente del ministerio de Ribera) sobre parcelas que no disponen de derechos de agua, para que el Gobierno regional inste a la restitución de los terrenos a su situación original.

“El cierre de regadíos en particular cerca del Mar Menor podría estar ya teniendo impacto en la laguna. Hemos visto plantaciones de secano como cebada y girasol. La cosecha de cebada ha sido muy buena. Esto es un antecedente muy importante, es la primera vez que terreno de regadío intensivo se transforma en secano”, destaca el responsable de ANSE. “Además, junto con el cierre de regadíos ilegales se control de la fertilización en el campo”, añade. 

El presidente de la Comunidad, Fernando López Miras, y la vicepresidenta tercera del Gobierno y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, con motivo de la puesta en marcha de la Oficina del Mar Menor, el pasado 2 de julio de 2022, en Murcia (España).
El presidente de la Comunidad, Fernando López Miras, y la vicepresidenta tercera del Gobierno y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, con motivo de la puesta en marcha de la Oficina del Mar Menor, el pasado 2 de julio de 2022, en Murcia (España).

Por su parte el gobierno autonómico ha puesto de relieve su iniciativa de retirar 16.562 toneladas de algas tanto en playas como en el interior del Mar Menor. Y el tanque de aguas de Torre Pacheco, una infraestructura formada por un tanque ambiental de 6.000 metros cúbicos y una balsa de laminación con capacidad de almacenamiento de 60.000 metros cúbicos. 

El miedo a una DANA

Este depósito de aguas aspira a ser estratégico de cara a evitar una nueva sopa verde en la laguna de cara a una DANA. Una lluvia torrencial arrastraría lodo y nitratos y puede ser el detonante de otra sopa verde. Por eso este año todos miran con miedo a  los pronósticos meteorológicos cuando el mar Mediterráneo ha alcanzado temperaturas muy altas que pueden causar tormentas y lluvias torrenciales. 

La laguna está muy tocada y va a tener una recuperación difícil".

Julio Barea, Greenpeace

“El peligro de la DANA es que se producen en un momento en el que los cultivos intensivos los campos de regadío están estercolados y cuando llega una lluvia torrencial arrasa todo lo que hay en superficie y lo lleva al mar”, explica Pedro Garcia. “Por suerte este año en las zonas más cercanas al Mar Menor, por ese abandono de los regadíos, hay menos superficie cultivada”, añade. 

“Estamos en vilo, como suceda una DANA vamos a estar abocados a un episodio de mortandad masiva de peces. La laguna está muy tocada y va a tener una recuperación difícil”, asegura Julio Barea, de Greenpeace. El temor de los ecologistas es que una nueva mortandad haga irrecuperable el ecosistema de la laguna.

Fotografía aérea cedida por la Dirección General de Seguridad Ciudadana y Emergencias en la localidad murciana de Los Alcázares
Fotografía aérea cedida por la Dirección General de Seguridad Ciudadana y Emergencias en la localidad murciana de Los Alcázares tras una DANA.

Acciones por implementarse

En el listado de actuaciones pendientes de ambas administraciones implicadas en la gestión de la Laguna, el Ministerio se ha puesto como objetivo hasta final de año de sumar la eliminación de 8.000 hectáreas de regadío ilegal, con el cierre de 140 pozos y 215 desaladoras. Esto supondría una importante reducción de la presión para el entorno. Para hacer una comparativa de lo que supone en volumen, en Andalucía se van a legalizar 1500 hectáreas de regadío en el entorno de Doñana. 

En el debe del MITECO se encuentra su plan de renaturalización que todavía está en fase de determinar qué propiedades serían expropiadas para llevar a cabo el plan de un cinturón verde que absorba los impactos que llegan al mar desde la agricultura.

En el debe de la comunidad murciana está la instalación de 15 balsas de astillas de madera de limonero que hagan de filtro para eliminar los nitratos de la rambla del Albujón, una iniciativa que está en fase de licitación.