No paran de aparecer nuevos datos sobre lo que está ocurriendo en Tailandia mientras continúa el juicio contra Daniel Sancho por el asesinato de Edwin Arrieta. Este martes se retoman las declaraciones de los testigos en Koh Samui. Es el turno de la defensa, después de que la coacusación presentara sus testimonios la pasada semana. Pero una nueva hipótesis del caso empieza a sacudir las informaciones que llegan a España.

Algunos medios se han hecho eco este lunes de un posible acuerdo entre Daniel Sancho y la justicia de Tailandia. Una información que partiría del hecho de que el fiscal, Jeerawat Sawatdichai, haya asegurado que resulta difícil demostrar la premeditación en el caso. Un enfoque que hace solo unas semanas parecían tener muy atado, utilizando los vídeos de Daniel Sancho comprando materiales en las horas previas.

El abogado Juan Gonzalo Ospina, que representa en España a la familia de Arrieta, hace declaraciones a los medios a su llegada a los juzgados el pasado 11 de abril.
El abogado Juan Gonzalo Ospina, que representa en España a la familia de Arrieta, hace declaraciones a los medios a su llegada a los juzgados el pasado 11 de abril.

Trato de favor hacia Daniel Sancho

Se habla de trato de favor hacia Daniel Sancho en la cárcel, donde se pasaría la mayor parte del tiempo en la enfermería con otro amigo español, supuestamente aquejado de una hernia. Esta zona sería más tranquila que el resto de la prisión y en donde se le estaría tratando del dolor de espalda que, sin embargo, no le habría obligado a abandonar la práctica diaria de Muay Thai, según publica La Razón en un extenso reportaje.

En él también se menciona la influencia de Alice, la fixer de Rodolfo Sancho. Es decir, una figura muy habitual en periodistas y profesionales en lugares de difícil acceso que sirve como traductora y facilitadora para que el actor pueda moverse por Tailandia. Sin embargo, según publica Joaquín Campos en el mencionado reportaje, los nativos aseguran que es "una persona muy importante, con contactos muy poderosos, que se mueve como pez en el agua en las altas instancias"

La presencia del encargado de asuntos consulares en Tailandia

Ignacio Vitórica Hamilton, a la salida de los juzgados en Koh Samui.

Otro de los temas que parecen estar siendo cuestionados es la presencia en la sala del juicio de un miembro del consulado de España en Tailandia. Se llama Ignacio Vitórica Hamilton, y es el encargado de asuntos consulares desde 2020, tras haber pasado 12 años en el Ministerio de Asuntos Exteriores y Cooperación. Las cámaras inmortalizaron a este diplomático en la tercera jornada del juicio en Koh Samui, pero al parecer habría estado en más ocasiones.

El primer día que Silvia Bronchalo, madre de Daniel Sancho, visitaba a su hijo en la cárcel estuvo acompañada por el representante de la diplomatura española en Bangkok, Vicente Cacho. No solo fue con la exactriz hasta la sala de visitas, sino que también habló con los medios a la salida. Según publicaba La Razón hace algunas semanas, esta actuación le habría valido una "reprimenda" por parte de sus superiores. Sin embargo, la presencia de Ignacio Vitórica Hamilton no se ha escondido y el diplomático se habría sentado incluso junto a la familia.

Preguntado por este tema, Juango Ospina, abogado de la familia de Edwin Arrieta, ha respondido a este periódico con contundencia: "Me preocupa". Según explica. "Hay que tener mucho cuidado con la imagen que da la presencia de un cónsul". Sobre todo cuando no es en absoluto habitual que haya representación consular en un juicio en el extranjero.

"¿Quién está pagando esto?"

Ante estas informaciones, Ospina se pregunta: "¿Está el Consulado de España apoyando al descuartizador de Tailandia? ¿Quién está pagando esto?". Aunque entiende una primera visita, a modo de asesoría inicial, Ospina no entiende los puntos hasta donde está llegando. "¿En calidad de qué va? ¿Por qué se sienta a la derecha de la familia?", añade.

La preocupación es tal que el letrado de Ospina Abogados asegura que se va a estudiar si es legítima la presencia consular o si viene motivada por otras causas.