Al menos 61 pasajeros llegados en dos vuelos procedentes de Sudáfrica han dado positivo en coronavirus en las últimas horas tras aterrizar en Ámsterdam. Según informa EFE, los pasajeros fueron sometidos a pruebas PCR nada más aterrizar, aunque ahora se deberá confirmar si son portadores de la variante Ómicron, que preocupa a los expertos por su alta cantidad de mutaciones y que ya empieza a ser preponderante en el cono sur africano.

Los 61 pasajeros fueron testados por el servicio municipal de salud, junto a otros 531 pasajeros -con prueba negativa-, atendiendo a las medidas de restricción de vuelos al tráfico aéreo procedente del sur de África. Los pasajeros habían sido retenidos en una zona del aeropuerto, sin contacto con el resto. Actualmente están alojados en un hotel de la zona de Schiphol bajo vigilancia.

Todos aquellos pasajeros que hayan dado positivo deberán estar en cuarentena durante siete días si tienen síntomas y cinco días si son asintomáticos, según la GGD. Por el contrario, los pasajeros que no hayan dado positivo pero viven en Holanda tendrán que aislarse en sus domicilios. Los que no residan en el país podrán continuar su viaje con normalidad.

"Los resultados positivos serán examinados rápidamente para ver si están relacionados con la nueva y preocupante variante, llamada Ómicron", ha informado en un comunicado la Autoridad sanitaria holandesa (GGD).

Fue la mañana de ayer cuando la presidente de la Comisión Europea, Ursula von Der Leyen, emitió un comunicado anunciando las cancelaciones de todos los vuelos procedentes del sur africano. Reino Unido fue el primer país en tomar las medidas de precaución, obligando a los viajeros procedentes de Sudáfrica, Namibia, Zimbaue, Botsuana, Lesoto y Suazilandia a guardar una cuarentena de 14 días para poder entrar en el país. Tras el país inglés, se sumaron más de seis países, incluido España, a la cancelación de los vuelos de la nación africana.

En el caso de España no se tomarán medidas restrictivas hasta el martes, que será cuando se produzcan la cancelación de todos los vuelos provenientes de Sudáfrica y Botsuana.