La irrupción de la Agrupación Nacional, antes Frente Nacional, en la Asamblea Nacional francesa como consecuencia de las elecciones legislativas del domingo es comparable a un tsunami. Así lo ha calificado el presidente interino del partido, Jordan Bardella. El partido de extrema derecha francés ha pasado de ocho a 89 diputados en la Asamblea Nacional. Es una victoria histórica para el partido que ha refundado Marine Le Pen.

Este grupo político es en realidad el gran ganador de estas elecciones. Por un lado, la coalición centrista que apoya al presidente Emmanuel Macron, Ensemble, es la primera fuerza política pero su mayoría es muy frágil. Cuenta con 246 escaños. Y por otro, el bloque de izquierdas abanderado por Jean-Luc Mélenchon (Nupes, Nueva Unión Política Ecológica Social), no ha logrado su objetivo de desbancar a Ensemble, de modo que Mélenchon no será primer ministro. Si Nupes, que tiene 142 diputados, finalmente se constituye en los cuatro grupos que lo constituyen (socialistas, comunistas, verdes e insumisos), será la Agrupación Nacional la primera fuerza de la oposición.

Discurso de Marine Le Pen durante la segunda vuelta de las elecciones legislativas, 19 de junio de 2022 / EFE

Una victoria sin precedentes

El éxito de la Agrupación Nacional fue una sorpresa. Supera con creces las expectativas de los dirigentes del partido y lo que habían anunciado los sondeos. Era previsible que contaran con un grupo parlamentario (15 diputados) pero no llegar hasta los 89. En 2017 solo ocho candidatos habían pasado por la puerta de la Asamblea.

En 1986, el primer año que el partido, entonces bajo el nombre de Frente Nacional y liderado por Jean-Marie Le Pen, padre de Marine, consiguió representación en la Asamblea. Obtuvieron 35 escaños.

En 36 años, el partido ha conseguido triplicar su número de afiliados. En este tiempo Agrupación Nacional ha sumado 886.023 votos, lo que supone un aumento del 33%.

El éxito cosechado en las recientes elecciones legislativas era poco esperado porque la campaña realizada por Marine Le Pen ha sido muy discreta. Lejos de la cobertura mediática de los debates de Nupes y del campo presidencial, se esperaba una puntuación similar a la de años anteriores, por debajo de los 10 diputados. Marine Le Pen, como candidata de Agrupación Nacional, logró un apoyo récord en las presidenciales con más del 42%. También pasó a segunda vuelta en 2017. Pero ese apoyo no se traducía en los mismos términos en las elecciones legislativas. El frente republicano (rechazo a los candidatos de Agrupación Nacional y antes Frente Nacional por ser de extrema derecha) ha funcionado en las presidenciales de este año.

Un nuevo impulso para el partido

Esta victoria electoral aporta al partido nueva vida, en forma de oxígeno financiero. Cuantos más diputados en la Asamblea Nacional, más ingresos públicos recibe. El partido está muy endeudado y ahora puede contar con los 10,3 millones de euros de subvenciones públicas anuales.

Si un partido obtiene el 1% de los votos en al menos 50 circunscripciones en la primera vuelta, puede reclamar 1,64 euros al año por votante. Al obtener 4.248.626 votos el 12 de junio, a la Agrupación Nacional le corresponden siete millones de euros al año. Es decir, 35 millones de euros desde ahora hasta 2027. Esta suma servirá para pagar el préstamo de un banco ruso que había financiado campañas electorales previas y así aliviar la carga económica de Jordan Bardella.

Una estatua adorna el patio de la Asamblea Nacional francesa en París, 20 de junio de 2022 / EFE

Así pues, la victoria política se traduce en una victoria económica que permitirá al partido engrosar sus filas y establecerse como partido predominante en la política francesa.

Además, estos escaños en la Asamblea también permiten al partido disponer de una amplia cobertura mediática. El grupo político dispondrá de más recursos, pero también de más tiempo de palabra y exposición. El éxito de Agrupación Nacional está siendo muy comentado en la prensa francesa y en la extranjera. Todo ello contribuirá a aumentar gradualmente la influencia del partido político. Se trata de un nuevo impulso para el grupo.

Las claves del éxito

La victoria de la Agrupación Nacional ha dejado perplejos a muchos. Es previsible que el partido se fortalezca, si bien los nuevos diputados se enfrentan a nuevos retos.

Las explicaciones de esta victoria

El odio a Ensemble (Macron) ha sido más fuerte que el odio a la Agrupación Nacional"

Luc Rouban, investigador

Las razones aducidas para explicar la irrupción del partido político de extrema derecha son numerosas y varían según la afiliación política de los comentaristas. Luc Rouban, director de investigación del CNRS y que trabaja en el CEVIPOF, explica a El Independiente: "Cuando se produjo el duelo Nupes/Agrupación Nacional, el 33% de los votantes macronistas se abstuvieron. Una minoría fue a votar a la Agrupación Nacional y el resto votó a Nupes. En un duelo entre Ensemble y Agrupación Nacional, la abstención es del 58%. El objetivo de estas elecciones para la extrema derecha y la coalición de izquierdas era impedir la elección de diputados macronistas. El odio a Ensemble (Macron) ha sido más fuerte que el odio a la Agrupación Nacional".

Para el investigador, este empuje puede entenderse también por "un importante movimiento de derecha de los franceses en temas culturales como la inseguridad o la delincuencia. Este movimiento de derechas ha aumentado especialmente en las clases medias y trabajadoras". Este aumento de poder de las ideas de extrema derecha ya se veía en los resultados de la primera vuelta de las elecciones presidenciales. Marine Le Pen había conseguido llegar a la segunda vuelta. "Juega con la carta social. Por lo tanto, tiene incluso más eco que Nupes en las clases trabajadoras."

La normalización del partido

Durante las elecciones presidenciales, la presencia del partido de Eric Zemmour, llamado Reconquista, en el juego político atenuó considerablemente el discurso de la Agrupación Nacional. Las ideas de Zemmour eran mucho más duras que las del partido de Marine Le Pen. En los medios solía repetirse que la Agrupación Nacional se había vuelto "demasiado blanda", "no lo suficientemente radical". Hubo una verdadera banalización del partido político.

Sin embargo, esta normalización se interrumpió bruscamente durante la segunda vuelta de las elecciones presidenciales. Frente a Marine Le Pen, Macron pidió un "frente republicano" para bloquear a la extrema derecha. Esta práctica se remonta a 2002, cuando Jean-Marie Le Pen, padre de Marine Le Pen, llegó a la segunda vuelta de las elecciones presidenciales frente al conservador Jacques Chirac, quien llamó a sus conciudadanos a votar por los valores de la República y, por tanto, contra la extrema derecha. Chirac arrasó con un 82,2%.

Los diputados recién elegidos visitan el hemiciclo. / EFE

No obstante, como señala Luc Rouban, "la Agrupación Nacional ya no es el Frente Nacional de Jean-Marie Le Pen... La xenofobia está ahora representada por Zemmour. La Agrupación Nacional se ha reorientado. Incluso podría decir que este año han puesto el tema de la inmigración en un segundo plano, también han puesto agua en el vino en el tema europeo". Añade que el partido puede incluso solaparse con otros de derechas porque "se dirige al mismo electorado que Los Republicanos en ciertos puntos".

"El frente republicano ha sido a menudo más un mito que una realidad, pero un mito tiene el mérito de dirigir la acción de los hombres"

Nicolas Lebourg

Sin embargo, fue interesante observar el uso de esta retórica en las elecciones legislativas. Una vez en la segunda vuelta, la mayoría presidencial no dio instrucciones claras para votar. No activó el "frente republicano" por miedo a que demasiados votos fueran a parar a la izquierda, Nupes.

El fracaso del "frente republicano" también puede explicar el gran avance del partido de Marine Le Pen en la Asamblea. Nicolas Lebourg, historiador francés e investigador del Centro de Estudios Políticos de Europa Latina y especialista en la extrema derecha, afirma en una entrevista en Libération que "el frente republicano ha sido a menudo más un mito que una realidad, pero un mito tiene el mérito de dirigir la acción de los hombres". Sin embargo, durante la segunda vuelta de las elecciones legislativas "el electorado de la Agrupación Nacional se movilizó, pero los otros segmentos políticos se negaron efectivamente a tomar una decisión durante los duelos".

Los nuevos retos

El recién formado grupo parlamentario quiere presentarse como el primer partido de la oposición. Jordan Bardella lo ha repetido mucho en distintas plataformas televisivas. "Con 89 diputados y un avance histórico, Marine Le Pen es la líder indiscutible de la oposición a Emmanuel Macron. Representaremos una oposición firme y responsable, dispuesta a preparar la alternativa".

Nupes, el bloque de izquierdas de Mélenchon, ya está debilitada. La unión de la izquierda se está desintegrando poco a poco para reformarse en la Asamblea en los partidos políticos que la componen. Por ejemplo, la sugerencia de Jean-Luc Mélenchon de que Nupes continúe como grupo único ha sido rechazada por todos menos por los insumisos. Si Nupes se disgrega en cuatro, la Agrupación Nacional supera al más numeroso de los cuatro, Francia Insumisa, así que será el principal de la oposición.

La Agrupación Nacional pretende monopolizar el liderazgo de la derecha"

Luc Rouban

Ahora, el partido extremista debe enfrentarse a nuevos problemas parlamentarios. "Su condición de grupo parlamentario de más de sesenta miembros le permite presentar un proyecto de ley ante el Consejo Constitucional, por ejemplo", subraya Luc Rouban. "La organización de la agenda, las comisiones de investigación, todo eso son cuestiones parlamentarias de un partido político. Al mismo tiempo, el grupo de extrema derecha debe cumplir sus objetivos ideológicos: controlar las fronteras de los flujos migratorios, actuar para mejorar el poder adquisitivo y extender la presencia de los servicios públicos en el territorio". Además, "la Agrupación Nacional pretende monopolizar el liderazgo de la derecha".