En un nuevo episodio de represión contra la libertad de expresión, las autoridades marroquíes han impedido abandonar el país este miércoles al destacado periodista local Abdellatif el Hamamouchi. El pasado agosto, en una entrevista a El Independiente, el reportero denunció las crecientes restricciones a las que se enfrentaba en su labor profesional. "Vivo bajo la estrecha vigilancia de la policía de paisano", advirtió.

"A Abdellatif el Hamamouchi, periodista y activista de derechos humanos marroquí, se le impidió a las 15:00 hora local embarcar en un avión que se dirigía a Estambul y después a Sarajevo", ha informado la organización Freedom Now Marruecos en un comunicado. El periodista había sido invitado por la Premio Nobel de la Paz, la yemení Tawakkol Karman, a participar en conferencia que versaba sobre la hoja de ruta para la transformación democrática del mundo árabe.

En el aeropuerto tres policías de paisano le confiscaron el billete y el pasaporte. El Hamamouchi vincula esta prohibición de abandonar el país a su activismo en favor de los derechos humanos y sus escritos en la prensa. "La policía me detuvo en el aeropuerto Mohammed V de Casablanca y me impidió embarcar. Iba a participar en una conferencia sobre la transición democrática. También me interrogaron sobre el contenido de la conferencia y mi relación con los organizadores de la misma", comenta.

Freedom Now Marruecos insta al gobierno marroquí a que respete la Constitución nacional y los convenios internacionales de derechos humanos que protegen el derecho a la libertad de expresión y a viajar.

El Hamamouchin es un periodista de investigación y politólogo marroquí que publica en medios extranjeros como The Intercept, Open Democracy o The New Arab. Por su labor incansable y jalonada de peligros recibió este año el galardón del Programa de Libertad de Expresión y Medios de Comunicación en el Norte de África de la ONG Article 19.

A una intensiva campaña de vigilancia se ha sumado la difamación a través de las sucursales mediáticas del aparato de seguridad marroquí. “Me han amenazado repetidamente con detenerme desde periódicos difamatorios leales a las autoridades. Suelen referirse a mí como 'traidor' y 'agente de países extranjeros'. ¿Por qué todo eso? Porque me niego a ceder a sus amenazas y sigo escribiendo mis artículos con moderación y objetividad.  No me considero opositor, y no me dirijo contra el régimen, pero el régimen se dirige contra mí… Si el régimen toma una buena decisión, escribiré positivamente sobre ella, y si hace lo contrario, la criticaré”, deslizó en la entrevista a este diario.