Cada cuatro años las miradas de todo el mundo se focalizan en Iowa, un estado agrícola del Medio Oeste con una población de tres millones de habitantes. El caucus de Iowa tiene un valor simbólico porque es el primer test al que se someten los aspirantes a ser candidatos a la Presidencia de EEUU. Aún así no siempre el vencedor en Iowa es el candidato: por ejemplo, en 2020 ganó Pete Buttigieg entre los aspirantes demócratas y finalmente fue Joe Biden el elegido.

En este 2024 electoral en todo el mundo, las presidenciales en la primera potencia global tienen un especial significado, ya que el ex presidente Donald Trump, con varios juicios pendientes y cuestionado por su papel en lo que podría considerarse una rebelión en el asalto al Capitolio en 2021, parte como favorito del Partido Republicano. Todo indica que Donald Trump se impondrá a sus rivales. La gran novedad este año son las temperaturas bajo cero: han llegado a datos extremos de -25 grados, lo que ha hecho temer que la participación sea muy baja.

En el lado demócrata opta a la reelección el presidente Joe Biden, a pesar de que en noviembre pasado cumplió 81 años. Como independiente aspira a la Casa Blanca Robert F. Kennedy Jr, hijo de Robert Kennedy, asesinado en 1968 cuando disputaba las primarias.

A continuación exponemos las claves de este caucus:

Iowa: caucus en lugar de primarias

En la mayoría de los estados se celebran primarias para designar al candidato presidencial, pero las asambleas electorales o caucus tienen un proceso diferente y más complicado. En las primarias los votantes emiten su voto en privado, en persona o por correo, durante la jornada electoral. En los caucus los miembros del partido acuden en persona a un lugar, que puede ser una iglesia o un colegio, donde se pronuncian discursos y luego eligen un nombre.

David Yepsen, decano del periodismo político en Iowa, lo resume con claridad: "Un caucus es una reunión de vecinos". Y de esa reunión sale el nombre del preferido para ser candidato a presidente. Más de 1.600 reuniones de este tipo se celebran este lunes en Iowa.

La mayoría de los estados celebran primarias, pero el Partido Republicano ha seguido fiel a los caucus en Iowa, así como en Nevada, Misuri, Idaho, Kentucky, Wyoming, Dakota del Norte y Hawai.

Cómo se vota en los caucus

En Iowa, los caucus republicanos y demócratas funcionan de manera diferente. Los resultados tardaron en conocerse en 2020 por un gran caos, de modo que los demócratas han hecho cambios. Se reúnen el día del caucus, pero la elección se hace por correo. Sin embargo, los republicanos inscritos de esta forma primero debaten con los vecinos sobre los temas más relevantes y, tras una hora de discusión, escriben el nombre del candidato. El presidente del caucus cuenta los votos y los envía a la representación del partido en el estado. Al cabo de unas horas da a conocer el resultado. Se sabrá quién ha ganado en Iowa en la madrugada del martes en España.

Por qué arranca la batalla en Iowa

Iowa consiguió ser el estado donde los aspirantes se estrenan "por accidente histórico". Tras la convención de Chicago de 1968, los demócratas quisieron dar más voz a los votantes que a los miembros del partido a la hora de elegir al candidato. En 1972, los demócratas de Iowa organizaron por casualidad la primera votación de este tipo. Cuatro años más tarde, los republicanos de Iowa hicieron lo mismo. El demócrata Jimmy Carter dio la sorpresa en Iowa. Quedó entonces demostrado el poder de ser el primer estado donde se vota. "La legislatura de Iowa aprobó una ley que obliga al estado a seguir programando sus caucus antes que cualquier otro", rememora The New York Times.

Trump, Haley y los otros aspirantes republicanos

El gran favorito en el campo republicano es el ex presidente Donald Trump, a pesar de sus complicaciones con la Justicia. Los otros tres más destacados son la ex embajadora ante la ONU Nikki Haley, el gobernador de Florida Ron DeSantis y el empresario Vivek Ramaswamy. En Iowa los principales rivales de Trump son Haley, más moderada, y DeSantis, empeñado en la guerra cultural. Donald Trump se presenta como una víctima de una caza de brujas y sigue insistiendo en que fue un fraude electoral lo que impidió que renovara su mandato en 2020.

Solo un 1% de los delegados

El caucus de Iowa tiene un valor simbólico, ya que solo están en juego 41 delegados, lo que corresponde a solo el 1% del total de los que forman parte de la Convención Republicana. El día clave será el llamado Super Martes, cuando se celebran primarias en varios estados y se decide tantos delegados que quien gane tendrá asegurada la nominación. Este año se celebra el 5 de marzo, y la víspera empieza uno de los procesos cruciales para Trump.

Sin embargo, la campaña del vencedor se verá beneficiada por un importante impulso. Siete de los últimos, 12 ganadores republicanos se impusieron en Iowa. En el lado demócrata fueron ocho de los últimos 11. Funciona como un trampolín porque es el arranque y el vencedor acapara los focos durante varios días. Los donantes quieren apostar por un caballo ganador, o que tenga posibilidades. Por ejemplo, será crucial para Nikki Haley ser segunda.

Trump, claro favorito

Las encuestas anticipan que el ex presidente ganará de calle: cuenta con un 48% de apoyos, menos que la media nacional. Haley tiene un 20% y DeSantis un 16%. Es decir, Trump tiene 28 puntos de ventaja en los últimos sondeos. Pero lo que está en juego es quién puede ser la alternativa a Trump si se complica su situación en los tribunales. Según explica Tom Beaumont, de Associated Press en The Guardian, "si Haley venciera a Ron DeSantis, eso señalaría casi con seguridad el final de la campaña de DeSantis y proporcionaría un impulso a Haley, que es más fuerte que cualquier otro candidato, sin contar a Trump, en New Hampshire".