Es el político más popular de Polonia, con permiso del primer ministro, Donald Tusk. El alcalde de Varsovia, Rafał Kazimierz Trzaskowski, nacido en la capital polaca hace 52 años, marcó el camino para vencer al populismo de Ley y Justicia (PiS) al lograr su primer mandato como "presidente" de la mayor ciudad de Polonia en 2018. Dirigente de Plataforma Cívica, partido hermano del Partido Popular de España, no es partidario de pactar con partidos populistas y asegura que así se lo ha dicho a sus correligionarios del PP. "Con partidos populistas como Vox o PiS es mejor no pactar. Así los normalizas y ponen en riesgo los derechos democráticos", afirma en conversación con El Independiente.

Hace seis años obtuvo un 56,7% de los votos con lo que fue elegido en primera vuelta. Este domingo opta a la reelección con la esperanza de repetir la gesta y evitar la segunda ronda el 21 de abril. Para lograrlo es fundamental que la participación ronde el 60%. Los sondeos anticipan que está muy cerca de conseguirlo: cuenta con un 49,7% de apoyos, según una encuesta del instituto Pollster para Rzeczpospolita. Competiría con la candidata de La Izquierda Magdalena Biejat que lograría un 16,2%. El aspirante del PiS, Tobiasz Bocheński, quedaría fuera de juego.

Trzaskowski apura el último día de campaña electoral, el viernes 5 de abril, con un recorrido por el centro de Varsovia, donde explica los cambios urbanísticos que están en marcha como la nueva Plac Centralny, junto al emblemático Palacio de la Cultura. Lleva calzado deportivo y se desplaza a buen ritmo seguido por una nube de periodistas y jóvenes voluntarios de su campaña. Selfi aquí, selfi allá, saluda a todo aquel con el que se cruza. Sabe que cada voto cuenta, pero no tiene que esforzarse porque es cercano y abierto.

Trzaskowski es, sobre todo, el favorito de las mujeres, quienes hicieron posible que Plataforma Cívica pudiera acabar con el mandato del PiS en las elecciones del 15 de octubre del año pasado. Los liberales de Plataforma, encabezados por Donald Tusk, pactaron con la Izquierda y los conservadores de Tercera Vía.

A su atractivo físico une su excelente preparación: ha estudiado en Oxford y en el Instituto de Estudios Estratégicos de París, y de joven pasó temporadas escolares en Australia y Estados Unidos. Es hijo de Andrzej Trzaskowski, quien fuera un conocido compositor de jazz. Ha sido secretario de Estado de Asuntos Europeos, eurodiputado, y candidato a la Presidencia en 2020. A punto estuvo de impedir la reelección de Andrzej Duda, del PiS, que ganó por la mínima (51% frente a 48,9%).

Mientras el alcalde camina por el centro de la capital, conversa con El Independiente en español. Bisnieto del lingüista Bronislaw Trzaskowski, Rafał es políglota. Habla inglés, francés, italiano y ruso, además de español y polaco. "Tengo muchos amigos y amigas españoles y me gustan los idiomas, aunque cometa faltas", dice el "presidente" de esta ciudad de más de tres millones de habitantes, una urbe dinámica y moderna que ya despunta como una de las más atractivas para la inversión de Europa Central.

Varsovia fue fundamental en la victoria de las legislativas de octubre. La movilización fue increíble. Ojalá ahora también vote mucha gente"

rafal trzaskowski, alcalde de varsovia

Varsovia, en vanguardia

Está orgulloso de que Varsovia haya sido "un ejemplo en la lucha contra el populismo". Trzaskowski evoca cómo el proceso empezó con su victoria en las elecciones de 2018. "El proceso empezó cuando ganamos la Alcaldía. Es muy importante para nosotros. Varsovia fue fundamental en la victoria en las legislativas de octubre: la movilización fue increíble. La participación rondó el 90%. Ojalá ahora también vote mucha gente", comenta el alcalde.

Está convencido de que la estrategia de partidos como Plataforma Cívica y el PP, que coinciden en el Partido Popular Europeo, no ha de pasar por pactar con los populistas. "He hablado con con mis compañeros del PP porque pienso que es algo peligroso pactar con Vox y convertirles en un partido normal. Tenemos que luchar contra el populismo y no hacer coaliciones contra quienes luchan contra la democracia europea", apunta.

No solo se trata del Estado de derecho, sino que luchamos por nuestros derechos"

"Desde el principio, en Polonia hemos librado una campaña contra el populismo. Tratamos de explicar a los ciudadanos que no se trata solo de la lucha por el Estado de derecho. Los populistas luchan contra nuestros derechos, contra lo que es importante para nosotros, como la prensa libre, la educación, porque los populistas abogan por el adoctrinamiento en las escuelas... Son derechos fundamentales en la democracia", indica Trzaskowski, con total convicción. 

Al último mitin de campaña, celebrado este viernes por la tarde en el barrio de Praga, ha acudido el primer ministro, Donald Tusk, quien ha pedido el voto para Trzaskowski con el objetivo de que no se eche a perder el "tesoro" conseguido en octubre. Tusk ha dejado claro que el PiS ha dejado una estela de corrupción por lo que hay que impedir que vuelva al poder. "En la política polaca hay una división muy clara entre el bien y el mal, entre la honestidad y los políticos delincuentes, o simplemente criminales. Ellos se llamaron la derecha unida (ZP, por sus siglas en polaco) pero en realidad son la delincuencia organizada (también ZP)", ha dicho Tusk.

En la política polaca hay una división muy clara entre el bien y el mal, entre la honestidad y los políticos delincuentes, o simplemente criminales"

donald tusk, primer ministro de polonia

Los efectos de la guerra en Ucrania

Trzaskowski está particularmente orgulloso de la actitud mostrada por los ciudadanos de Varsovia en relación a los refugiados procedentes de Ucrania. En la capital de Polonia se escucha hablar ruso en cada esquina porque se ha convertido en un lugar de acogida por excelencia para ucranianos y bielorrusos, que aprenden rápido el polaco y en seguida se lanzan a abrir pequeños negocios, sobre todo en el sector de la restauración.

"Recordemos que en Europa hubo una crisis en 2015 por las llegadas desde el Mediterráneo y al principio eran unos 200.000 los que querían refugiarse en toda la UE. Luego fueron más. En Varsovia, al principio de la guerra, había unos 300.000 refugiados ucranianos. Todos llegaron a la capital en apenas tres semanas. Y he de decir que la migración ha mejorado la ciudad. Los varsovianos han sido solidarios. Han sido los ciudadanos polacos los que han decidido ayudar a los refugiados. El gobierno local de Varsovia ha desempeñado un papel importante en la acogida, guiado por esta voluntad de los ciudadanos", señala.

Varsovia es una ciudad segura. Polonia es un país seguro... Pero hemos de estar preparados para todos los escenarios"

En este sentido, la guerra se nota en Varsovia. Ha cambiado la ciudad y la ha hecho más cosmopolita. También hay decisiones importantes que llaman la atención como esa partida de 30 millones de euros, dedicados a habilitar refugios en previsión de ataque desde Rusia. ¿Es alarmista o es necesario? "Tenemos que preparar a la ciudad para todas las crisis potenciales como la pandemia, la migración o la guerra en Ucrania. Es un deber del gobierno central, cierto, no del gobierno local, pero Varsovia ha sido relevante en todas las crisis. En la pandemia nuestra estructura de salud fue muy importante para luchar contra el Covid y también en la cuestión migratoria", comenta el alcalde.

Y añade: "En cuanto a la guerra, Varsovia es una ciudad segura. Polonia es un país seguro gracias a que estamos en la OTAN. Pero hemos de adecuar los refugios porque es mejor estar preparados para todos los escenarios. No es una paranoia, es prevención".

A Trzaskowski muchos le ven como el candidato ideal para que Plataforma recupere la Presidencia del país. La coexistencia entre el gobierno de Tusk con el actual presidente, Andrzej Duda, del PiS, no ha sido fácil, ya que Duda ha intentado evitar que el nuevo gobierno ponga en marcha sus políticas. Si el presidente fuera de Plataforma, el gobierno de coalición de Polonia podría avanzar más rápidamente en sus reformas.

El alcalde no descarta ese salto a la Presidencia, ya que "todo cambia muy rápido en política". Sin embargo, asegura que hoy por hoy, considera "un honor ser alcalde de Varsovia".