Sobre la bocina. Justo cuando iba a arrancar el juicio entre Fox News y Dominion el juez Eric Davis, del Tribunal Supremo del estado de Delaware, ha anunciado que ambas partes han llegado a un acuerdo para evitarlo. De esta manera, la cadena de noticias 24 horas estadounidense ha aceptado pagar una suma de 787,5 millones a la empresa de recuento electoral, que le reclamaba en primera instancia más del doble, 1.600 millones de dólares, por acusarle en 2020 de manipular las elecciones presidenciales de Estados Unidos. Una cifra que se estima que la cadena recuperará con sus ingresos en un año, pero que supone un buen bocado a sus cuentas y, sobre todo, sienta un precedente histórico.

Le teoría del amaño electoral fue impulsada por Donald Trump para justificar su derrota en las urnas. Y aunque nunca pudo demostrarse acabó siendo el germen del asalto al Capitolio que se produjo en 2021, cuando se celebraba una sesión para certificar la victoria de Joe Biden.

Fox News, sin embargo, se encargó por entonces de propagar este discurso, emitiendo en antena acusaciones contra Dominion aún sabiendo que eran falsas, tal y cómo se ha demostrado en los documentos filtrados recientemente. En ellos, el dueño de la cadena, Rupert Murdoch, confirma que sólo lo hicieron por una razón: no perder audiencia y, por lo tanto, no perder dinero.

La estrategia de la Fox en los casos por difamación

"Fox confiaba en que el juez se tragara los argumentos de su defensa, como siempre lo han hecho. Que yo conozca, han tenido al menos una docena de juicios similares por difamaciones. Y se defendían siempre diciendo, y esto lo dijo su propio abogado, que nadie en su sano juicio podría pensar que los datos que dan en sus programas son reales", explica el periodista Guillermo Fesser, corresponsal en EEUU para El Intermedio, que añade que centraban el tiro en culpar a la gente por no entender su contenido.

"Se limitaban a decir que hacen programas de entretenimiento y que los presentadores decían lo que decían porque se les ocurría a ellos. Y hasta ahora los jueces siempre se lo habían creído, porque desestimaban celebrar los juicios. Ahora no ha colado porque hay pruebas descaradas de que la intención de mentir era muy fuerte. Vistieron como informativos contenidos con la intención de mentir para ganar dinero", comenta Fesser.

Esta vez, sin embargo, además de utilizar sus argumentos clásicos, la cadena usó uno completamente nuevo. "Fox aportó en su defensa para este juicio cuatro vídeos de distintos capítulos de Los Simpson, que en Estados Unidos se emiten en su cadena", explica Fesser, que asegura que lo hicieron con ánimo de demostrar que ellos no se "inclinan" políticamente por ningún bando.

En los vídeos, el personaje principal de la serie, Homer Simpson, vota indistintamente por candidatos de los dos partidos principales. En una ocasión lo hace por el demócrata Barack Obama, en otra por el republicano Mitt Romney, en otra duda entre hacerlo por Biden o por Trump y en el último de los capítulos es persuadido por Vladimir Putin, que aparece disfrazado como un votante estadounidense más, para que vote por Donald Trump.

El peso de la libertad de expresión en EEUU

Aunque parezca una tontería, la defensa de Fox aludiendo a la libertad de expresión y de opinión de sus presentadores era poderosa, más aún en un país donde estos dos conceptos son sagrados. "La libertad expresión no necesita contar hechos veraces. Es simplemente una interpretación o percepción de lo que ha pasado", Juan Luis Manfredi, catedrático Príncipe Asturias y profesor en la Georgetown University de Washington.

"La novedad es que ahora ya no vale con pedir perdón y que digan que han exagerado. El dinero es una multa por haber mentido a sus espectadores a sabiendas. Es un hito importante para contrarrestar las fake news y la desinformación. Firmando el acuerdo reconocen su culpa. Eso ya es bastante novedoso, pero es que además va a sentar un precedente en la jurisprudencia, porque a partir de ahora cualquier juez sabe que la cifra que se ha pagado es el mínimo que se debe pagar en otros juicios", asevera Manfredi.

Los dos expertos coinciden en que la parte negativa del acuerdo es que no obliga a la Fox a pedir disculpas en antena sobre lo sucedido. De hecho, en el comunicado que hizo público la cadena asegura que han decidido firmarlo por el bien del país, y añaden que se ha tratado de un acuerdo "amigable" y que seguirán haciendo el mismo periodismo que han realizado hasta ahora, que ellos califican como "de alto standard".

Sin embargo, la cadena tiene aún otro juicio pendiente casi calcado. En este caso la empresa que les ha denunciado es Smartmatic, también especializada en recuentos electorales y que, al conocerse la noticia del acuerdo entre Fox y Dominion, ya ha anunciado que ellos no firmarán nada parecido, y que pretenden llegar hasta el final del asunto. Quién sabe si, quizás, puedan aprovechar las pruebas que Dominion aportó en su juicio para inculpar a la cadena.

"Al final Dominion es una empresa privada. Su objetivo no es que a Estados Unidos le vaya mejor ni defender los derechos humanos. Ellos creen que si la Fox ha accedido a pagar tanto será por algo. Empresarialmente la cifra les basta para justificarlo ante sus accionistas. Y moralmente la idea de evitar un conflicto que divida más al país les vale", explica Fesser. Y añade: "Dominion está valorada en 80 millones. Si la Fox le ha pagado 800... la desproporción es tan grande que es obvio que no quieren que salga algo muy gordo en el juicio".

El futuro de Fox News

Queda por ver cómo tratará a partir de ahora la cadena en sus emisiones tanto las pasadas elecciones de 2020 como la futura campaña presidencial de Donald Trump, que con toda seguridad tratará de ser elegido como candidato republicano para la Casa Blanca en 2024. Y a pesar de lo sucedido, Manfredi no considera que traten de dar un giro editorial.

"La estrategia de Fox consiste en generar dudas. Y el público trumpista se ha demostrado que está muy orientado a escuchar teorías de la conspiración. Trump sigue encajonado en el discurso que le hizo ganar en 2016 de que él representa a un ciudadano norteamericano medio creyente en la libertad. A la Fox le viene bien y le conviene ese candidato, porque están bastante alineados con esas ideas. No cambiarán su estrategia", asegura el catedrático.

"Trump es mafia. Y Murdoch pensó que deshacerse de él y apostar por otro candidato sería fácil. Pero su cadena no puede permitirse perder a los seguidores de Trump, le apoyarán", asegura Fesser, que apunta a que el responsable de toda esta situación ha salido indemne hasta el momento: "Fox se ha encontrado con que por defender a Trump están en el punto de mira por difamación. Ahora mismo no tienen más remedio que aliarse con él y su discurso de la caza de brujas. Ha habido grandes juicios por difamaciones tanto contra la Fox como contra abogados de Trump, como Rudy Giuliani y Sidney Powell. Pero no hay nada contra Trump, que es el que inició todo esto"

Sin embargo, el periodista asegura que la manera de entender el periodismo de la cadena está caduca, en un país que considera que ya está iniciando una nueva etapa: "La guerra de Fox a largo plazo está perdida. EEUU ya es otra cosa. Pero mientras desaparecen seguirán haciendo daño. Queda por ver cuánto durarán y cuánto daño harán".